Los líderes de los países del G20 alcanzaron un consenso sobre su declaración final, durante la reunión celebrada en Río de Janeiro. Se incluyeron dos palabras en dos párrafos diferentes a último momento y luego fueron aprobadas por todos los representantes.
El presidente de Argentina, Javier Milei, tuvo reservas sobre el texto, pero el documento fue aprobado, en la práctica, sin objeciones. Las consideraciones del mandatario quedaron anotadas, pero no están en la versión final.
«Nos reunimos en el lugar de nacimiento de la Agenda de Desarrollo Sostenible para reafirmar nuestro compromiso de construir un mundo justo y un planeta sostenible, sin dejar a nadie atrás», dice el texto.
La declaración final, que contiene 22 páginas y 85 párrafos, incluye críticas veladas a Israel por la situación en Gaza y en el Líbano.
«Expresamos nuestra profunda preocupación por la catastrófica situación humanitaria en la Franja de Gaza y la escalada en el Líbano, enfatizamos la urgente necesidad de ampliar el flujo de asistencia humanitaria y reforzar la protección de los civiles y exigimos el levantamiento de todas las barreras a la prestación de asistencia humanitaria a gran escala; destacamos el sufrimiento humano y los impactos negativos de la guerra», dice la declaración.
La declaración también logró consenso a la hora de pedir que cesen los ataques de Israel, aunque en ningún caso menciona directamente al país que gobierna el primer ministro Benjamín Netanyahu.
Respecto al conflicto en Ucrania, la declaración destaca que los líderes de los países del bloque están dispuestos a acoger con agrado iniciativas que apoyen una paz integral, justa y duradera.
El documento fue aprobado por consenso con la firma de todos los líderes presentes, incluyendo la del presidente de EEUU, Joe Biden, y la del canciller ruso Serguéi Lavrov (que representa al presidente Vladímir Putin). Sputnik