Ante la llegada del ciclón tropical John al golfo de México, varias empresas petroleras comienzan a evacuar al personal de las instalaciones de la zona, escribe el portal ‘Oilprice’. Sin embargo, se observa que los precios mundiales de crudo apenas reaccionaron a posibles interrupciones del suministro de crudo desde la región.
El 23 de septiembre, la estadounidense Chevron completó la evacuación del personal no esencial de las instalaciones en el golfo de México, incluidas las plataformas Anchor, Big Foot, Blind Faith, Jack, Petronius y Tahiti.
Por su parte, la gigante británica Shell declaró que estaba vigilando la trayectoria del huracán por si podía afectar a sus activos y operaciones en la mencionada región y se disponía a interrumpir la producción en dos plataformas: Stones y Appomattox.
Mientras tanto, la empresa noruega Equinor ya ha evacuado al personal menos esencial de su plataforma Titan, informa el medio.
No obstante, a pesar de las inquietudes, los precios del petróleo «están reaccionando más bien a las noticias económicas y geopolíticas procedentes de otros lugares» que a las posibles interrupciones del suministro de crudo desde el golfo de México, afirma el portal.
Las noticias sobre el descenso de la actividad empresarial en las principales economías de la Unión Europea —Alemania y Francia— aumentaron la preocupación en los mercados sobre la demanda sostenida de petróleo de estos países.
Con respecto a Oriente Medio, Israel lanzó su ataque más mortífero contra el Líbano desde 2006, lo que agudizó aún más la situación en esta región petrolera clave.
Por otra parte, China anunció una serie de medidas de reactivación de su economía, que aliviaron en parte los temores a la debilidad de la demanda de este gran consumidor mundial de petróleo.
En este contexto, a las 09:30 GMT, el crudo WTI (una corriente de crudo producido en EEUU) cotizaba a 72,14 dólares por barril, mientras que el Brent, que marca la referencia en los mercados europeos, superaba los 75,66 dólares por barril a la misma hora. Sputnik