A la Vuelta de la Esquina
IVÁN RUIZ FLORES
México se incendia… no sólo electoralmente.
La actual temporada de elevadas temperaturas está afectando severamente a la República Mexicana con graves quemazones y… apenas empezó.
El periodo de altas temperaturas en México abarca de la tercera semana de marzo hasta la primera semana de octubre. No estamos ni siquiera a la mitad de la misma y los incendios están a la orden del día.
Afortunadamente hay cifras oficiales que dan una idea al ciudadano común de lo que está pasando y tal vez lo lleven a establecer lineamientos para estas temporadas.
La Comisión Nacional Forestal es la encargada de estos asuntos. Ellos exponen cifras, aunque no abarcaban los hechos ocurridos por ejemplo en Valle de Bravo, donde las quemazones de los bosques están a la orden del día, de la misma manera que sucedió en Acapulco.
Sin embargo, posteriormente precisaron que hasta el corte del día martes 7 de mayo “se registran 79 incendios forestales activos ubicados en 15 estados del país”.
Además… Para la atención de los mismos se encuentran trabajando un total de 2,470 combatientes.
Y como no hay nada que indique que se registrará alguna disminución en cuanto a calor, la recomendación para la población es no hacer uso del fuego en zonas forestales y colindantes, ya que se pronostican altas temperaturas, poca precipitación y vientos fuertes.
ENTRE EL FUEGO
Y EL MIEDO
Hasta el martes 7 de mayo, había 79 incendios forestales activos en 15 estados del país, con una superficie preliminar afectada de 33 mil 357.23 hectáreas. Asimismo, se tenía un total de 15 incendios liquidados, es decir, ya no representan un riesgo de propagación del fuego.
¿Y qué zonas están siendo afectadas?
Por ejemplo, seis áreas naturales protegidas: dos en el Área de Protección de Recursos Naturales CADNR 043 Estado de Nayarit, en los municipios de Mezquital y Durango, en el estado de Durango; una en la Reserva de la Biosfera Sierra de Manantlán, municipio de Casimiro Castillo y una en el Área de Protección de Flora y Fauna Bosque de la Primavera, municipio de Tala, en Jalisco; una en el Área de Protección de Flora y Fauna Nevado de Toluca, municipio de Zinacantepec, Estado de México; una en la Reserva de la Biosfera Sierra Gorda, municipio de Landa de Matamoros, Querétaro; y una en el Parque Nacional Tulum, municipio de Tulum, en Quintana Roo.
La Conafor explica que los equipos aéreos que se encuentran operando en el país o en disposición son: para el incendio del predio particular Innominado, municipio de Bustamante, Tamaulipas, opera un helicóptero de Gobierno del Estado.
Mientras, en Jalisco, en el incendio Ciudad Cajetes/Llano Grande, municipio de Tala, opera un helicóptero de Gobierno del Estado, el cual realiza descargas.
Asimismo, en el estado de Michoacán, un helicóptero de la Guardia Nacional se encuentra disponible para la atención del incendio en la comunidad indígena Tarecuato/ Cerro La Chuparrosa.
Y en el incendio Huertitas, municipio de Río Verde, en San Luis Potosí, un helicóptero de Gobierno del Estado realiza descargas.
Lo que está sucediendo ya nos lo habían advertido. Fue durante la segunda jornada de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, que la Convención de la ONU de Lucha contra la Desertificación (CNULD) presentó en un informe los últimos datos relacionados con la sequía, los cuales apuntan a “una emergencia sin precedentes a escala planetaria, en la que los impactos masivos de las sequías inducidas por el ser humano apenas están empezando a manifestarse”.
Ya lo estamos viendo… Por cierto, el retrato global de la sequía “revela la urgencia de esta crisis y el imperativo de aumentar la resiliencia (…) en todo el mundo”, declaró el secretario ejecutivo de la Convención.
“Necesitamos una transformación profunda para hacer frente a sequías que cada vez son más frecuentes y graves, reduciendo los niveles de los embalses, hundiendo el rendimiento agrícola, afectando la diversidad biológica y extendiendo las hambrunas”, añadió Ibrahim Thiaw.
El informe fue elaborado en colaboración con la Alianza Internacional para la Resiliencia a la Sequía (IDRA).
ADVERTENCIAS
Y PREDICCIONES
Las predicciones de organismos internacionales apuntan a que 170 millones de personas sufran sequías extremas si la temperatura media mundial aumenta 3º por encima de los niveles preindustriales. Esto representaría 50 millones más de lo previsto si el calentamiento se limita a 1.5º.
Entre las soluciones que mencionan los especialistas sobresale la restauración del suelo, la gestión sostenible de tierras y las prácticas agrícolas respetuosas con la naturaleza como aspectos críticos para aumentar la resiliencia global al fenómeno.
Además, precisan:
“Adoptando técnicas agrícolas como cultivos resistentes a la sequía, métodos de riego eficientes, labranza cero y otras prácticas de conservación del suelo, los agricultores pueden reducir el impacto de la sequía en sus cosechas y en sus ingresos”.
Pero no es todo, porque la gestión eficiente del agua es otro componente clave de la resistencia mundial a la escasez de agua. “Esto incluye la inversión en sistemas sostenibles de suministro de este recurso, medidas de conservación y la promoción de tecnologías eficientes para su uso”, se expone.
Y recalcan:
“La preparación ante los desastres y los sistemas de alerta temprana también son esenciales para la resistencia mundial a la sequía.
“Invertir en vigilancia meteorológica, recopilación de datos y herramientas de evaluación de riesgos puede ayudar a responder rápidamente a las emergencias por la sequía y minimizar sus impactos”.
De otra manera… ya lo estamos viviendo… ¡el desastre!
