¡A LO MERO MACHO… !!
POR EDMUNDO CÁZAREZ C.
La comunicación social, es un fenómeno sustancial a la naturaleza del hombre. Son los procesos de comunicación masiva y la forma de cómo se da están estos, los que determinan, muchas de las veces, el tipo de sociedad y hasta el régimen político que caracteriza a un pueblo y a una nación.
Sin lugar a dudas, una de las principales funciones de la comunicación, es la de contribuir a elevar el nivel cultural de la sociedad, conservando las características y afirmando los valores que integran nuestra idiosincrasia, permitiéndole, además, distinguir, que comparte valores e intereses en un país integrado por aspectos de mercado e intercambios múltiples de bienes y servicios. Indiscutiblemente, la comunicación se convierte de manera automática, en la “memoria” de la comunidad, pues es través de su acumular noticioso, quiérase o no, que se transforma en la fuente histórica más importante.
Aunado a lo anterior y desde la óptica de quien esto escribe, puedo calificar que un comunicador puede resultar un excelente especialista en relaciones públicas, pues con la opinión pública a su favor, nada puede fracasar. Pero sin ella… ¡Nada, pero nada, puede salir bien!!
¿Por qué le digo todo esto mi querido lector de MISIÓN POLÍTICA?
Existen infinidad de ensayos y documentos relativos a las formas primitivas de la comunicación en el ser humano, y casi todas, apuntan que las primeras formas de comunicación surgieron antes que el hombre apareciera como tal en la faz de la tierra. Que los primeros signos y señales se dieron entre los prehomínidos y/o “homo erectus”, es decir, mucho antes que nuestros antepasados caminaran erguidos. Sin embargo, hay muchos autores que sostienen que dicha comunicación ya existía antes que el hombre apareciera.
En dichos albores, no existía el lenguaje oral como tal, sino que los hombres primitivos se comunicaban entre sí, a través de gruñidos y gestos. Así es que, el lenguaje se fue desarrollando de manera paulatina entre las antiguas culturas, las cuales, tenían muy diferentes formas de ejercer esa comunicación, además de dicho lenguaje, si es que. así le podemos llamar, utilizaban, jeroglíficos y pinturas rupestres.
A lo Mero Macho, tanto el hombre como la mujer, son seres comunicativos por naturaleza propia. Cómo me hubiera gustado presenciar aquellas épocas para haber hecho un buen reportaje y saber cómo fue que el “homo sapiens” se comunicó por primera vez al emitir sonidos guturales, mostrando esa urgente necesidad de comunicarse. Bueno… ¡se vale soñar!!
Pero hoy, en pleno Siglo XXI, los elementos de comunicación son tan diversos y se dan, gracias a la necesidad de ser más rápidos y claros al comunicarnos, resultado de miles de años de un vertiginoso avance de la tecnología, así como a la creación de los medios de comunicación y de las “benditas redes sociales”, como lo dijera alguna vez, el cavernícola que vive atrincherado en Palacio Nacional, aunque ya nada más faltan 175 días para que se largue mucho a La Chingada.
Afortunadamente, ha quedado sepultado aquella idea cuando calificaban a la televisión como “la caja idiota”. Quieran o no, la televisión ha sido un elemento fundamental en el proceso de desarrollo de la humanidad, no solamente en cuanto a la comunicación se refiere, sino que, en un momento dado, se ubicó como columna vertebral de la educación y cultura. Su alcance y cobertura la convirtieron en la fuente principal de información y entretenimiento.
En México, desde su creación, la televisión ha sido un factor importantísimo de unión familiar, aunque, quien esto escribe, todavía no le había tocado nacer.
Así es que una mañana del 18 de mayo de 1934, desde el cuarto de su baño, ubicado en la planta alta de la calle de Havre número t4, el ingeniero Guillermo González Camarena, joven estudiante del Instituto Politécnico Nacional, de tan solo 17 años de edad, tuvo la genial idea de realizar experimentos con un sistema de televisión en circuito cerrado. Posteriormente, totalmente animado, decide montar un laboratorio y logra crear lo que se convirtió en las instalaciones de la primera estación de radio la XEQF.
Cinco años más tarde, inventa su propio sistema hibrido de televisión a color, el cual, a diferencia de otros sistemas creados en los Estados Unidos, podía adaptarse a los ya existentes sistemas de televisión en blanco y negro, así es que, este destacado y célebre mexicano, lo bautiza como Sistema Tricromático de Secuencia de Campos y obtiene la patente de su invento.
Es conveniente recordar que la primera transmisión de televisión en blanco y negro en nuestro país, se llevó a cabo el 19 agosto de 1946. Fue tanto el éxito que había conquistado, que, a tan solo unos cuantos días, el 7 de septiembre, se inaugura oficialmente la primera estación de televisión experimental no solamente en México, sino en toda Latinoamérica bajo las siglas XEIGC y que estuvo transmitiendo todos los sábados durante dos años.
Para no aburrirlo, mi muy estimado lector de MISIÓN POLÍTICA… ¡A lo Mero Macho!!, debemos sentirnos muy orgullosos porque el primer canal de televisión comercial que existió en toda América Latina, XHATV – Canal 4, estaba en la Ciudad de México y le había sido concesionado a la legendaria familia O´Farril, saliendo al aíre la primera señal la noche del 31 de agosto de 1950, y tan solo un día después, el primero de septiembre, transmite la primera señal a control remoto con el Informe Presidencial del licenciado Miguel Alemán Valdés.
Un año después, nace XEW – TV Canal 2, propiedad de don Emilio Azcárraga Vidaurreta, con una transmisión especial desde los terrenos del Parque Delta, que después se convertiría en el legendario Parque del Seguro Social.
Indudablemente, México ha crecido con el esfuerzo y talento de muy valiosos mexicanos, y no, como dice la bestia convertida en presidente de la 4T, que el México de antes no servía para nada… ¡Qué pendejo está!!
UNA PRUEBA TANGIBLE DE ESE PORTENTOSO AVANCE DE LA TELEVISIÓN EN MÉXICO… lo pudimos observar la noche del pasado domingo 7 de abril, en la señal de Imagen Televisión, con el excelente Post Debate, que protagonizaron el hermano adoptivo de López Obrador, el archi millonario Epigmenio Ibarra y el orgulloso michoacano, el senador Germán Martínez, un formidable programa conducido por el talentoso Ciro Gómez Leyva.
¡Bravo!!… Otra vez… ¡Bravo!!, que delicia ver este tipo de televisión inteligente, vaya que batalla campal tan divertida e interesante, en donde el brillante senador michoacano le dio una cátedra de cultura al sátrapa Epigmenio Ibarra, quien se hizo bien “chiquitito” ante los embates de un destacado abogado que trae las leyes y reglamentos en la palma de su mano.
Muchas felicidades a Imagen Televisión….
Ojalá que el perverso inquilino de Palacio Nacional, no se le vaya a ocurrir la maquiavélica idea de ordenar un segundo atentado en contra de Ciro Gómez Leyva, por el berrinche de ver cómo quedó en ridículo el creador de su imagen, a quien le ha regalado millones y millones de pesos para que lo muestre en videos como el presidente más bonito…. ¡Qué asco!!
No se le olvide que, gracias Dios, ya nada más faltan 175 días para que… ¡se vaya mucho a La Chingada!!, el presidente más ignorante y perverso que haya tenido México en toda su historia. Nada ni nadie podrá destruir a esta gran nación.
Si Dios lo permite… A lo Mero macho, nos vemos la próxima semana…
Eso es todo por hoy… ¡Saludos Cordiales!!