*A Nueve Meses de Entregar el Poder, la Destrucción Continúa
*Hoy, los Damnificados de Guerrero y la Costa del Pacifico Pagarán por la Abolición del Fonden
*Con la Extinción de los Fideicomisos del Poder Judicial Sumarán 122 los Cancelados
NIDIA MARIN
¿En dónde se ubicará la peor herencia de Morena para el próximo sexenio?
La competencia es encarnizada.
Se pelean el cetro: la Ciudad de México (con el Metro, por ejemplo), Guerrero, con los asesinatos que ya se cuentan por decenas diarias; Michoacán que no canta mal las rancheras en la misma materia de víctimas de la criminalidad; Chiapas, con la frontera en llamas, gracias al crimen organizado; Baja California, donde las víctimas del fentanilo se recogen de las calles diariamente; Guanajuato, Tamaulipas y Sinaloa, en competencia en cuanto a derramamiento de sangre y todo el país con la desaparición de fideicomisos para los trabajadores.
Es toda la República Mexicana la que está en crisis.
Es el México de López Obrador. Es el país de “abrazos, no balazos”. Es el triste panorama (nos quedamos cortos) en este 2023, cuando falta menos de un año para que, afortunadamente, el tabasqueño se vaya a su rancho. Sí, allá, derechito y sin estorbos.
¿O no?
Nadie lo garantiza y en cambio, muchos mexicanos consideran que buscará la manera de seguir mangoneando a quien se deje, (seguramente a su elegida como títere), para continuar en la destrucción de México junto con su familia: esposa e hijos mayores.
Aún faltan 11 meses para que uno de los peores mandatarios que ha tenido México deje el poder. El primero de octubre de 2024 deberá concluir para siempre su cargo como presidente de la nación.
Sin embargo, lo peor es que cuando ya se va, sigue haciendo daño, ahora al pretender arrebatarles el dinero a trabajadores del Poder Judicial en una venganza sin precedentes que tiene tintes, además, de maldad.
Una más.
Sí, en su nefasto historial quedarán acciones perversas, como es la eliminación fondos. Es una larga lista de destrucción: Fondo de Desastres Naturales (Fonden), el Fondo para el Deporte de Alto Rendimiento, Fondo de Cooperación Internacional en Ciencia y Tecnología, el Fondo de Innovación Tecnológica de la Secretaría de Economía, así como el Fondo Sectorial Conacyt-Secretaría de Energía, el Fondo de Financiera Rural, el Fondo de Inversión y Estímulos al Cine (Fidecine), el Fondo Sectorial para la Innovación, el Fondo para los Extrabajadores Migratorios, el Fondo de Ayuda, Asistencia y Reparación Integral, el Fondo Metropolitano, el Fondo Sectorial Conacyt-Segob CNS para la Seguridad Pública, el Fondo Sectorial de Investigación de la Secretaría de Relaciones Exteriores o el Fondo para el Cambio Climático, el Fondo Nacional de Cooperación Internacional para el Desarrollo y el Fondo para la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas.
De acuerdo a sus declaraciones realizadas en 2020 el propósito de dicha política era combatir el despilfarro de los bienes y recursos nacionales, “para garantizar la administración de los recursos con eficacia, economía, transparencia y honradez”.
Hoy, por ejemplo, pagarán las consecuencias del despilfarro y desfalco, los damnificados de Guerrero, Oaxaca y buena parte de la Costa del Pacífico debido a los destrozos causados por el ingreso de Otis, el huracán ¡categoría 5! Ya no existe el Fondo de Desastres Naturales.
¿Y los recursos económicos dónde quedaron? No se sabrá, porque es información reservada por años.
Aunque, desde ahora ya está saliendo a la luz la verdad sobre las tropelías efectuadas con los recursos de los 109 fideicomisos eliminados (también Segalmex es un ejemplo, entre otros), pero no cesa en su maldad.
LA PERVERSIDAD
INSATISFECHA
¿Serán los Fideicomisos de los trabajadores del poder judicial los últimos que les arrebate Morena a los asalariados?
No. Sus pretensiones continúan, por ejemplo, para eliminar la Secretaría Ejecutiva del Sistema Nacional Anticorrupción, así como extinguir o fusionar 17 más a fin de reestructurar la Administración Pública Federal.
De acuerdo a Forbes, pretende que diversos organismos desconcentrados y descentralizados “…se conviertan en unidades administrativas, como la Coordinación General de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados, la Secretaría Ejecutiva del Sistema Nacional de Población Integral de Niñas, Niños y Adolescentes, el Servicio Nacional de Inspección y Certificación de Semillas, el Instituto Nacional de Pesca y Acuacultura, entre otros”.
En planteamientos del Instituto Mexicano de Competitividad de aprobarse la reforma para desaparecer los fideicomisos del Poder Judicial se afectaría la independencia de este poder y la división de poderes.
Específicamente, tendría un impacto en las prestaciones y pensiones de los trabajadores, además de obstaculizar la implementación de reformas en materia penal, civil y laboral.
Al haber sido aprobada la minuta de la Cámara de Diputados por la colegisladora, Senado de la República en una sesión fast-track el pasado martes, en una cerrada votación y en la que destacó el voto en contra de la ministra en retiro, Olga Sánchez Cordero, se abrió la ventana para la presentación de acciones de inconstitucionalidad que preparan los bloques de oposición legislativa; las controversias constitucionales que podrían presentar los órganos autónomos y el alud de amparos que se prevé solicitarán los trabajadores del poder Judicial de la Federación.
Con el banal argumento de que la extinción de 13 de los 14 fideicomisos administrados por el Poder Judicial –Suprema Corte, el Consejo de la Judicatura y el Tribunal Electoral- es para “acabar con los privilegios de los ministros, los diputados aprobaron su desaparición y enviaron la minuta al Senado que, ni tarde ni perezoso, atendió las indicaciones presidenciales.
Horas antes de aprobarse en el Senado, la ministra Norma Leticia Piña Hernández había aceptado asistir a la Junta de Coordinación Política de la Cámara Alta, atendiendo la invitación que hiciera a nombre del grupo parlamentario de Morena, el congresista Alejandro Rojas Díaz-Durán a la cual se sumaron los coordinadores del PAN y el PRI, Julen Rementería y Manuel Añorve.
Sin embargo, el presidente de la Jucopo, Eduardo Ramírez echó por tierra la convocatoria y anunció que el Senado, como Cámara, no había invitado formalmente a la presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
La postura de Ramírez se produjo después de que el presidente López Obrador asegurara que no hace falta el diálogo entre el Congreso y el Poder Judicial. “Es más espectáculo” y sería una falta de respeto para quienes asisten a la Cámara de Senadores.
PARTE DEL ANÁLISIS
REALIZADO POR EL IMCO
Al analizarlo, el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) advirtió que afecta la división de poderes y la independencia del Poder Judicial de la Federación.
Consideró:
“Un Poder Judicial fuerte es esencial para el estado de derecho. La interferencia y ataque políticos vulneran y debilitan el sistema de pesos y contrapesos, amenazando la certidumbre jurídica necesaria para el desarrollo económico. Una reforma que se plantea como presupuestaria, pero que tiene un impacto negativo en la solidez del Poder Judicial, afecta el estado de derecho, el entorno empresarial y la inversión, reduciendo las condiciones de competitividad del país”.
También precisó en su análisis:
“La iniciativa pone en riesgo la estabilidad de fondos que no solo se nutren de recursos presupuestarios, sino también de las contribuciones de los propios trabajadores acumuladas a lo largo de años. Estos fondos se utilizan para cubrir servicios médicos de emergencia, pensiones y reubicaciones derivadas de compromisos laborales. En resumen, este dictamen no solo afecta la integridad del Poder Judicial en su conjunto, sino que también perjudica a trabajadores que han dedicado su vida profesional a la carrera judicial”.
Sobre el particular y durante la sesión en la que se aprobó la extinción de los fideicomisos, la ministra en retiro, expresidenta de la mesa Directiva del Senado, exsecretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero dijo que Dijo que “la posibilidad de que dos poderes se coaliguen para intervenir en la administración de otro poder no es un ejercicio republicano”.
En su participación desde la tribuna del Senado, confesó que hablaba en favor del respaldo institucional y la salvaguarda de derechos de 22 mil 896 oficiales judiciales, oficiales de partes, técnicos de videograbación, técnicos de servicio, intendentes y oficiales de seguridad; traigo a este pleno argumentos a favor de 11 mil 314 secretarias o secretarios de tribunal, secretarias o secretarios de juzgado, directores de área, secretarias y secretarios de apoyo, administradoras y administradores regionales y actuarias o actuarios.
“Soy portadora del mensaje de mil 721 juezas y jueces, magistrados y magistradas, así como de mil 211 defensoras y defensores públicos, asesoras y asesores jurídicos que atienden a la población de menos recursos”, dijo.
Sus sólidos argumentos no conmovieron a los “duros” de Morena y sus aliados.
Y ante tal situación está a la orden una tormenta: de amparos interpuestos por aquellos que laboran en uno de los tres poderes del país: el Judicial, hoy blanco de la ira, la arbitrariedad y la venganza, de parte de quien encabeza otro poder: el Ejecutivo, apoyado por los títeres morenistas del tercer poder: el legislativo.
Sí, es una pena para México.
Hasta ahora, conocido lo que sucedió, queda claro que, en adelante, los trabajadores y los mexicanos en general, no se irán con la finta y revisarán perfectamente por quién votar en el proceso electoral de 2024.
AMLO ha sido el destructor más eficaz de México. Dejará un país en ruinas, mucha ira en el ambiente y una sociedad mayoritaria odiándolo.
Más vale que se cuide… no vaya a ser el diablo.
