Comerciantes reprochan a Sheinbaum que les quiera cobrar seguridad

La Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec) criticó que el gobierno de la Ciudad de México pretenda cobrar por lo menos 2 mil pesos a los negocios del Centro Histórico por la instalación de un botón de pánico que se conecte al Centro de Comando, Control, Cómputo, Comunicaciones y Contacto Ciudadano, conocido como C5, como parte del plan Mi Calle / Negocios.

Si bien Cuauhtémoc Rivera, presidente de la Anpec, dijo que ya era hora que la jefa de gobierno Claudia Sheinbaum reaccionara y presentara una estrategia para combatir los delitos que se dispararon en la CDMX durante mayo, convirtiéndolo “en el mes más violento para los capitalinos”, sostuvo que es su obligación garantizar la seguridad de los ciudadanos.

Incluso consideró que el uso de los teléfonos celulares sirven más como botones de pánico ya que por ahí se envían mensajes de alerta por whatsapp o cualquier otra otra red social, y por eso planteó que se podría organizar a las comunidades para blindarse contra la inseguridad conectándose a la plataforma del C5, sin que implique mayores gastos.

Juan Manuel García Ortegón, titular del C5, ha explicado que la inversión mínima por el paquete de seguridad previsto en el nuevo plan Mi Calle / Negocios es de 9 mil pesos que se dividen en los citados 2 mil pesos para el botón de pánico más dos cámaras por 7 mil pesos. El costo puede elevarse hasta 60 mil pesos en el caso de 16 cámaras para un centro comercial.

Si el gobierno capitalino pretende que pequeños comerciantes, tiendas departamentales y plazas comerciales inviertan en tecnología para protegerse de los delincuentes, surgen dudas sobre el uso y destino de los impuestos, dijo Rivera.

La frágil seguridad y estabilidad de la capital del país, acusó, “se le está yendo de las manos a la jefa de gobierno, pero que no nos venda espejitos. Debe entender que es obligación de su gobierno brindar seguridad y si quiere cobrar por la instalación de cámaras y botones de pánico la pregunta que surge es ¿a dónde se están yendo los impuestos?”.

No obstante, consideró que los pequeños comerciantes estarían dispuestos a hacer una aportación económica para el mencionado plan pero menor a los 2 mil pesos referidos y con pagos en abonos pues consideró que dicha tecnología se puede adquirir más barata, más aún si se compra al por mayor.

El dirigente de la Anpec advirtió que debe tenerse cuidado en que este plan de seguridad no sirva para enriquecer a una o varias empresas proveedoras de dicha tecnología, sobre todo cuando se tiene la experiencia de que muchos de los botones de pánico que ya existen actualmente en la ciudad no funcionan.

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