Punto de Vista
Por Jesús Michel Narváez
Con la equivocada no estrategia de abrazos, no balazos, bajo el argumento de que “la violencia no se combate con la violencia”… hay que “ir a la raíz y atacar la pobreza”, entre otras equivocaciones, ha permitido que los grupos criminales, principalmente los cárteles de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación, se apoderen de enormes extensiones del territorio nacional y la olvidada Chiapas, la abandonada Chiapas, la explotada Chiapas, la pacífica Chiapas, se encuentra bajo metralla, incendiada y sin que nadie del gobierno federal o estatal e incluso el municipal hagan como que hacen pare frenar la presencia de los sicarios de ambos bandos.
Chiapas era reconocida globalmente por su cultura, por su selva Lacandona, por su historia democrática, por sus usos y costumbres, por pueblos como San Cristóbal de las Casas, sus pirámides y sepulcros en Palenque y, por supuesto, por el “levantamiento y declaración de guerra del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN)”.
Su frontera con Guatemala siempre fue utilizada para el cruce ilegal de mercancías y de inmigrantes. Sin embargo, la paz era su carta de presentación para conocer las bellezas que posee, entre las Lagunas de Montebello, el Cañón del Sumidero y las grandes plantaciones cafetaleras.
Si bien se registraban enfrentamientos entre habitantes de diversos municipios por problemas de deslindes de tierras y en algunas zonas se sembraba y cultivaban enervantes y no faltaba el narcomenudeo, todo estaba, por lo menos en apariencia, controlado.
En el gobierno del jurista, porque es doctor en derecho e incluso fue presidente del Tribunal Superior de Justicia, Rutilio Escandón, un hombre que presume sin tapujos ser de izquierda, el panorama social ha cambiado por el arribo de contingentes criminales de los cárteles antes mencionados y que buscan apoderarse de importantes zonas para el trasiego de cocaína y opio.
No hay día en que no se registren asesinatos, secuestros extorsiones, balaceras, linchamientos.
Y el desgobernador osa decir que “no pasa nada” y encuentra el aval del huésped temporal de Palacio Nacional.
Y aunque la violencia obedezca principalmente al tema de las drogas, mucho tiene que ver con la sucesión gubernamental.
Desde el pasado gobierno, el que encabezó Manuel Velasco Coello, se advertía el crecimiento de la criminalidad y la violencia. Empero, se estimaba la existencia de “acuerdos” para que no se actuara exponencialmente.
El resurgimiento del Cártel de Sinaloa, que vivía acosado por el de Jalisco, no fue “antes del gobierno” de Andrés Manuel, lo que podría confirmar lo denunciado públicamente por Porfirio Muñoz Ledo: “existe un pacto con los cárteles criminales… es un narco estado”.
El actor principal de los monólogos matinales desde Palacio Nacional ha reiterado que la “prensa amarillista, corrupta y conservadora” difunde “noticias falsas” y por eso se crea el ambiente de que Chiapas está en crisis social, política, económica y de violencia criminal.
Son mentiras, ha sostenido, no obstante las evidencias que confirman lo contrario.
Los convoyes de camionetas con decenas de hombres mostrando su poderoso armamento, como lo confirmó y difundió Reforma este domingo, son vistos por todos los habitantes menos por la Guardia Nacional, el Ejército o la Marina.
¿Connivencia, órdenes superiores, falta de inteligencia?
Vaya usted a saber. Los hechos hablan por sí mismos y estos gritan: Chiapas se incendia… esta incendiada.
E-mail: jesusmichelpm@hotmail.com, Facebook Jesus Michel, Twitter @misionpolitica y en Misión, Periodismo sin Regaños martes y jueves de 16 a 17 horas por Radio Cañón en el 760 de amplitud modulada.