Hernán Gomez Bruera. Traición en Palacio: el negocio de la Justicia en la 4T. Editorial Grijalbo, 2023. 346 páginas
DAVID MARKLIMO
Julio Scherer Ibarra, hijo del periodista y fundador del semanario Proceso, Julio Scherer García, es un abogado que se sumó al proyecto de Andrés Manuel López Obrador en 2006, cuando fue parte del equipo jurídico que denunció el fraude electoral en la elección presidencial en la que asumió la Presidencia de la República, Felipe Calderón Hinojosa, con 0.58% de ventaja. Con el paso de los años, Scherer Ibarra se convirtió en uno de los hombres más cercanos y de más confianza de AMLO. La hemeroteca señala que, en la última campaña a la presidencia de la República, fue el operador político y coordinador de Morena para la región sur-sureste. Con la victoria del 1 de julio de 2018, Scherer Ibarra fue anunciado como el Consejero Jurídico de la Presidencia, cargo en el que estuvo casi por tres años. Era, en muchos sentidos, el número dos del gobierno.
Y es, por decirlo de algún modo, el protagonista de la historia del libro Traición en Palacio: el negocio de la Justicia en la 4T, del politólogo Hernán Gómez Bruera. Bien lo dice la contraportada, el libro es la historia del exconsejero jurídico y la forma en cómo aprovechó su posición privilegiada para controlar buena parte del sistema de justicia y promover una presunta red de negocios judiciales. Es, entonces, un clásico caso de tráfico de influencias y uso indebido del cargo público. Otro funcionario que llegó para servirse con la cuchara grande. El problema es que eso chocaba con el discurso presidencial de luchar contra la corrupción y la impunidad y donde la Paz sólo es posible si hay Justicia.
Y, sin que eso deje de ser interesante -porque muestra los entresijos y entrevelas de cómo funciona un gobierno- resulta aún más interesante por lo que dice sobre el Poder Judicial de la Federación. Resulta que el Poder encargado de dar cauce institucional a los múltiples conflictos del país es un mercado: ahí se sostienen privilegios y se vende impunidad. Para muestra un botón: Juan Ramón Collado Mocelo había sido el parachoques legal en numerosos casos, desde divorcios, corrupción o asesinatos, de gobernadores de distintos bandos —como el panista Francisco Domínguez, o el priista Mario Villanueva—, el poderoso sindicalista de Pemex, Carlos Romero Deschamps; el ex presidente Enrique Peña Nieto o el empresario y hermano de otro ex mandatario, Raúl Salinas de Gortari. Ligado a ese caso, aparece Scherer denunciado por una presunta extorsión para obtener ventajas e información sobre dichos personajes. Esa actuación ocasionó un choque de trenes con el Fiscal General de la República, Alejandro Gertz, que lo acusó de obstrucción a la Justicia.
La lectura de este libro deja con varios pendientes: cómo es que el Presidente López Obrador, en su primera legislatura, no viese con buenos ojos la Reforma al Poder Judicial. ¿Creyó que bastaba con la buena sintonía con Arturo Zaldívar, el presidente de la Suprema Corte? La propia experiencia de gobierno, el día a día, mostraba que era importante: muchas de las iniciativas del gobierno eran requeridas ante la Justicia, a tenor del amparo. Leyendo cómo funciona la justicia en México, quedaba claro: cualquiera, entonces, con algo de poder económico podría poner en jaque al gobierno. En ese sentido, Traición en Palacio es una crítica a los esfuerzos insuficientes de la Cuarta Transformación (IVT) para erradicar estos problemas. ¿La lucha contra la corrupción no incumbe a los ámbitos de los juzgados? ¿A quién le favorece que el clima de impunidad perviva? La evidencia está ahí: a pesar de las promesas de combatir la corrupción y separar el poder económico del político, los mecanismos corruptos en el sistema de justicia siguen vigentes. ¿Ha sido un iluso el presidente o un encantador de serpientes? He ahí la grandísima duda.
