Los líderes de la UE acordaron este lunes prohibir la exportación de petróleo ruso al bloque de 27 países, dijo el presidente del Consejo de la UE, Charles Michel, mientras las fuerzas ucranianas y rusas luchaban en las afueras de Severodonetsk, la última ciudad que sigue en manos de Kiev en la estratégica provincia ucraniana de Luhansk.
Michel dijo en Twitter que la prohibición cubriría inmediatamente más de dos tercios de las importaciones de petróleo de Rusia «cortando una enorme fuente de financiación para su maquinaria de guerra».
Los líderes de la UE, reunidos en Bruselas, también acordaron excluir al mayor banco ruso, Sberbank, del sistema SWIFT y prohibir otras tres emisoras estatales rusas, añadió Michel.
Poco antes del anuncio, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, dijo que la situación seguía siendo «extremadamente difícil» en la región del Dombás, donde Rusia ha centrado su esfuerzo militar tras fracasar en la toma de la capital de Ucrania, Kiev, en marzo.
Zelenski había calificado a la UE de demasiado blanda con Moscú cuando parecía que los líderes no llegarían a un acuerdo sobre la prohibición del petróleo.
Antes, en Washington, el presidente Joe Biden dijo que Estados Unidos no enviará a Ucrania sistemas de cohetes que puedan llegar a Rusia, una decisión que el vicepresidente del Consejo de Seguridad ruso, Dmitri Medvedev, calificó de «racional».
Rusia ha dicho que el objetivo de su «operación militar especial» era ahora tomar toda la región del Dombás, formada por dos provincias, Luhansk y Donetsk, que Moscú reclama en nombre de separatistas ucranianos prorrusos.
La captura de Severodonetsk y de su ciudad gemela, Lisichansk, en la orilla opuesta del río Síverski Donets, daría a Rusia el control en la práctica de Luhansk y permitiría al Kremlin declarar algún tipo de victoria después de más de tres meses de muerte y destrucción.Pero al centrar su esfuerzo en una batalla por una única ciudad pequeña, Rusia puede dejar otros territorios abiertos a los contraataques ucranianos.