El estado tendrá su primera gobernadora este 5 de junio cuando la ciudadanía elija de entre las cinco candidatas que hoy compiten para dirigir una entidad que ha crecido mucho en materia poblacional y económica, pero que no se ve reflejado en los bolsillos de la gente.
La población de Aguascalientes ha crecido 14 por ciento durante los últimos siete años, y se estima que durante 2022 llegue a 1.5 millones de habitantes, cuyo principal reclamo es la precariedad laboral en la que viven pese a que el estado ha recibido numerosa inversiones y la llegada de empresas trasnacionales, sobre todo del ramo automotriz.
En el tema económico, Tere Jiménez, candidata de Va por Aguascalientes, alianza formada por PAN-PRD-PRI, propone atraer nuevas inversiones que generen más empleos mejor pagados; para ello buscará la ampliación y modernización de las redes carreteras y ferroviarias que aprovechen la ubicación estratégica de la entidad. Además proyecta la creación de un nuevo Centro Logístico en la Región Norte del estado conformado por parques industriales y agroparques.
Nora Ruvalcaba, la abanderada de Morena, propone la creación de Banmujer, institución que brindará crédito a la palabra sin intereses a mujeres emprendedoras. También pretende hacer de Aguascalientes un municipio de explotación minera, salvaguardando la integridad de los habitantes que circundan estos yacimientos, así como el medio ambiente.
Por su parte la candidata de Movimiento Ciudadano, Anayeli Muñoz, propone incentivos fiscales, la creación del Instituto Estatal Emprendedor, dignificar a los trabajadores del campo, promover el turismo y sobre diversificar la economía.
Martha Márquez, que representa a la alianza PT-PVEM, asegura que Aguascalientes puede convertirse en motor económico del Bajío, para lo que considera terminar con la brecha salarial ocasionada por la diferencia de género, crear empresas familiares, impulsar el comercio local, así como fortalecer el campo y los agronegocios.
Por último, Natzielly Rodríguez, candidata de Fuerza por México, propone transformar el sector primario y contribuir a que las industrias otorguen mejores salarios a los trabajadores.