Vladimir Putín, presidente de Rusia, sostuvo este martes que el Ejército de su país cumplirá el noble objetivo de proteger a la gente del Donbás con la campañamilitar en Ucrania.
«Así será. No hay duda (de que las Fuerzas Armadas lograrán sus objetivos). Los objetivos son totalmente claros y nobles», aseguró durante una visita al cosmódromo ruso de Vostochni, acompañado por el presidente de Bielorrusia, Alexandr Lukashenko, según reprodujo la televisión estatal Rossía 24.
«El objetivo principal es ayudar a la gente del Donbás, que reconocimos y que nos vimos obligados a defender, porque las autoridades de Kiev, empujadas por Occidente, se negaron a cumplir con los Acuerdos de Minsk destinados a una solución pacífica de los problemas» en esta región del este de Ucrania, dijo.
Según el mandatario ruso, el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, comentó públicamente que Kiev no estaba de acuerdo con ninguna cláusula de los Acuerdos de Minsk, mientras que «otros funcionarios afirmaron que la implementación de los mismos es imposible».
«Lo rechazaron públicamente. Bueno, simplemente era imposible seguir tolerando este genocidio que duró ocho años» desde el inicio del conflicto armado entre el Ejército ucraniano y los separatistas prorrusos de Donetsk y Lugansk, subrayó el mandatario.
Desde el extremo oriente del país, el jefe del Kremlin señaló además que el choque «con las fuerzas antirrusas» surgidas en Ucrania era inevitable y que solo era una cuestión de tiempo.
«Comenzaron a convertir a Ucrania en una plaza de armas antirrusa y a cultivar los brotes de nacionalismo y neonazismo que había hace tiempo», afirmó.
Putin indicó que en el país vecino «se cultivó especialmente la mala hierba del neonazismo y el choque de Rusia contra estas fuerzas era inevitable, ellas solo esperaban el momento para atacar».
El jefe de Estado sostuvo que lo ocurrido después mostró cuán profundamente habían crecido las ideas neonazis en Ucrania.
«Este es un hecho evidente. Lamentablemente, el neonazismo se ha convertido en un hecho de la vida en un país bastante grande cerca de nosotros. Esto es algo obvio: era inevitable, solo era cuestión de tiempo», agregó.