El más amplio respeto a la determinación de la Suprema Corte de Justicia en el caso de Alejandra Cuevas y Laura Morán, manifestó esta noche la Fiscalía General de Justicia la Ciudad de México (FGJCM) y ofreció atender lo que le corresponda jurídicamente.
Sin embargo, en un comunicado, precisó que las sentencias firmes son las únicas que definen la acreditación plena del delito y la responsabilidad penal.
El máximo tribunal del país otorgó hoy un amparo a esas dos personas, a quienes Alejandro Gertz, fiscal general de la República, las demandó por la muerte de su hermano.
Amparada, Alejandra Cuevas fue liberada y salió del penal femenil de Santa Martha.
Señala la Fiscalía: «Nuestra institución se rige bajo el principio de la búsqueda de la verdad. Presentamos pruebas, con base en ellas, los juzgadores adoptan sus resoluciones, mismas que pueden ser revisadas, perfeccionadas o reconsideradas a lo largo del proceso penal».
En su actuar, la Fiscalía General de Justicia enafatza que «es autónoma, no obedece a intereses personales, no fabrica culpables ni delitos, ni genera acuerdos al margen de la Ley».
Menciona también, «somos críticos de nuestro trabajo y no caemos en auto complacencias. Por el contrario, privilegiamos el análisis a fondo y revisamos las actuaciones que así lo requieran. Tras la resolución, atenderemos lo que nos corresponda jurídicamente».
EL día de hoy, la Suprema Corte de Justicia de la Nación aprobó con 11 votos, otorgar el amparo a Alejandra Cuevas, hija de Laura Morán Servín, esta última acusadas por Alejandro Gertz Manero, de haber asesinado a su hermano, Federico Gertz, “por el abandono de persona”.
El ministro presidente, Arturo Zaldívar ordenó que se debe informar a las autoridades correspondientes la determinación del máximo tribunal, “para poner en libertad a la quejosa, Alejandra Guadalupe Cuevas Morán”, quien estaba presa, como “garante accesoria” de la acusación a su madre, a pesar de que Cuevas no vivía en el domicilio que compartían Federico Gertz y su madre.
El ministro expuso que no puede existir un delito si no hay una ley que lo establezca como tal, por lo que Cuevas no podía ser responsable de la muerte de Federico Gertz, debido a que era de edad avanzada y tenía padecimientos propios.