El vicepresidente de Estados Unidos, J. D. Vance, mantuvo una audiencia con el cardenal Pietro Parolin, el número dos de la Santa Sede, esto como parte de su visita a Roma.
«Durante las cordiales conversaciones», afirma el comunicado difundido por el Vaticano sobre la reunión, «se expresó la satisfacción por las buenas relaciones bilaterales existentes entre la Santa Sede y los Estados Unidos de América, y se reiteró el compromiso común de proteger el derecho a la libertad de religión y de conciencia».
El comunicado añade que «se intercambiaron opiniones sobre la situación internacional, especialmente en relación con los países afectados por guerras, tensiones políticas y situaciones humanitarias difíciles, con especial atención a los migrantes, refugiados y presos. También se abordaron otros temas de interés mutuo».
Según precisó la Oficina de Prensa de la Santa Sede, en la audiencia también estuvo presente el Arzobispo Paul Richard Gallagher, secretario para las Relaciones con los Estados y las Organizaciones Internacionales.
Por su parte, el comunicado difundido por la oficina del vicepresidente de EEUU evitó toda mención a la migración —un tema espinoso para la Administración republicana, que ha prometido llevar adelante «la mayor deportación de indocumentados de la historia» del país norteamericano— y detalla que Vance y Parolin hablaron sobre su fe religiosa compartida, así como de «la difícil situación de las comunidades cristianas perseguidas alrededor del mundo», entre otros asuntos.
El Vaticano informó además que Vance participó en la Solemne Liturgia de la Pasión del Señor la tarde del Viernes Santo en la Basílica de San Pedro, acompañado de su esposa y sus dos hijos, como parte de los actos del fin de semana de Pascuas.
El mismo viernes, el vicepresidente de EEUU mantuvo en Roma un encuentro con la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, quien había estado menos de 24 horas antes en Washington reunida con el presidente Donald Trump y el propio Vance en la Casa Blanca.
Por el momento, ni EEUU ni el Vaticano informaron de una reunión entre el vicepresidente y el papa Francisco, quien ha limitado dramáticamente sus actividades en las últimas semanas tras haber estado internado más de un mes por problemas respiratorios. Sputnik
