
El Comando Norte de Estados Unidos anunció este 22 de marzo que el buque destructor USS Spruance –provisto con misiles guiados clase Arleigh Burke– partió de la base naval de San Diego a la frontera con México.
En un comunicado, el comando indicó que la embarcación tiene la misión de realizar supuestas operaciones de combate al «terrorismo marítimo, la proliferación de armas, la delincuencia trasnacional, la piratería, la destrucción del medio ambiente y la inmigración» vía marítima.
«El despliegue del USS Spruance como parte de la misión fronteriza sur del Comando Norte de EUU aporta capacidad adicional y amplía la gama de capacidades militares únicas que ofrece el Departamento de Seguridad Nacional», declaró el comandante del Comando Norte de EEUU, el general Gregory Guillot.
«Con el Spruance frente a la costa oeste y el USS Gravely en el Golfo de México, nuestra presencia marítima contribuye a la respuesta coordinada del Departamento de Defensa a la Orden Ejecutiva Presidencial y demuestra nuestra determinación de lograr el control operativo de la frontera», añadió.
El jueves (20 de marzo), el buque destructor Gravely partió hacia la frontera sur de Estados Unidos con el objetivo de realizar las mismas tareas.
Al respecto, la presidenta de México, Claudia Sheibaum, aseguró que el buque de guerra patrulla en aguas internacionales.
«No es contra México, están en aguas internacionales vigilando por si llega droga o alguna otra situación en EEUU», dijo la jefa de Estado.
Por su parte, la cancillería de Cuba rechazó el despliegue del buque destructor, al considerar que se trata de una acción que atenta contra la seguridad de la región.
«Esta presencia militar en la zona representa una amenaza a la seguridad y la paz de América Latina», aseveró el canciller cubano, Bruno Rodríguez. Sputnik