El director general del Fondo Ruso de Inversión Directa (RDIF, por sus siglas en inglés), Kiril Dmítriev, apostó por unas conversaciones positivas con Estados Unidos en la primera reunión ruso-estadounidense de alto nivel que acoge Arabia Saudita.
«Esperamos que sea un debate positivo, un diálogo positivo y vemos que el presidente [estadounidense, Donald] Trump resuelve de manera activa gran cantidad de problemas en el mundo. Esperamos que la posición de Rusia sea escuchada atentamente y prosiga el diálogo», declaró a la prensa el alto ejecutivo que forma parte de la delegación rusa en esas conversaciones.
El 18 de enero las comitivas de Rusia y de EEUU se dan cita en la capital saudí para buscar la normalización de las relaciones entre las dos grandes potencias, concretar la primera cumbre entre el presidente ruso, Vladímir Putin, y su homólogo estadounidense, Donald Trump, y facilitar posibles negociaciones para resolver el conflicto ucraniano.
Dmítriev destacó la importancia de la cooperación económica y subrayó que las compañías estadounidenses perdieron más de 300.000 millones de dólares al abandonar el mercado ruso.
«Hallar vías económicas conjuntas y soluciones positivas a los problemas es crucial, ante todo, para EEUU y para otros países que comienzan a entender que el mercado ruso es muy atractivo y se debe estar presente», aseveró.
Agregó que los proyectos conjuntos de Rusia y Estados Unidos contribuirán al éxito de las economías de ambos países.
«Les sorprende mucho que la economía rusa esté creciendo. La Administración Biden difundía mucha desinformación y muchos mensajes erróneos. Nuestro diálogo nos permite decir la verdad, decir que la economía rusa se está desarrollando bien y que necesitamos realizar proyectos conjuntos, incluido en el Ártico y otros sectores», declaró.
La delegación rusa está compuesta también por el ministro de Exteriores, Serguéi Lavrov, y el asesor del Kremlin Yuri Ushakov.
Por la parte estadounidense, está previsto que participen en la reunión el secretario de Estado, Marco Rubio, el asesor de seguridad nacional, Mike Waltz, y el enviado especial para Oriente Medio, Steve Witkoff.
Putin y Trump mantuvieron una primera conversación telefónica el 12 de febrero en la que abordaron Ucrania, Oriente Medio, el canje de presos, el programa nuclear iraní y el estado de las relaciones entre Moscú y Washington. Sputnik
