El sábado 1 de febrero, sujetos desconocidos emboscaron desde el aire a miembros de la Célula de Bases de Operaciones Interinstitucional (BOI) desplegada en el municipio de Guadalupe y Calvo, Chihuahua. Los elementos heridos fueron trasladados de emergencia a Sinaloa para recibir atención médica.
Horas más tarde, fuentes de la Secretaría de la Defensa Nacional (Defensa) confirmaron a Infobae México que entre los lesionados estaba el comandante de la 42 Zona Militar, Jorge Alejandro Gutiérrez Martínez, cuyo estado de salud fue reportado como estable, ya que las heridas provocadas por la detonación fueron superficiales y no ponen en peligro su integridad.
Gutiérrez Martínez es general de Brigada Diplomado de Estado Mayor (DEM) y asumió la comandancia de la 42 Zona Militar, con sede en Hidalgo del Parral, el pasado 4 de enero. Anteriormente se desempeñó el mismo cargo en la 28 Zona Militar y la 44 Zona Militar, ambas en el estado de Oaxaca.
Como resultado del ataque con artefactos explosivos también resultó lesionada Aida Roxana “N”, adscrita a la Agencia Estatal de Investigación (AEI) de Chihuahua, así como los castrenses Eliseo Carlos “N” y Humberto “N”, cuyo estado de salud se mantiene bajo reserva. De acuerdo con los reportes preliminares, la detonación también ocasionó daños a un vehículo militar y una camioneta de la Fiscalía General del Estado (FGE).
La agresión ocurrió cuando el convoy de elementos de seguridad realizaba un operativo en el poblado de Dolores, entre la cabecera municipal y la localidad de Lechuguilla, una zona en donde ya se habían registrado ataques previos con estas características.
Ante estos hechos, distintas corporaciones estatales y federales coordinaron un despliegue táctico en la región con el fin de identificar y detener a los responsables.
Cabe recordar que el 31 de diciembre de 2024, integrantes de la célula BOI de Guadalupe y Calvo emprendieron un viaje hacia Dolores con el objetivo de auxiliar a tres familias que, debido a la inseguridad, decidieron abandonar sus hogares.
Durante su trayecto, un artefacto fue detonado desde el aire, pero al no causar afectación alguna, las fuerzas de seguridad continuaron su camino. Más adelante fueron atacados con cinco explosivos más, los cuales causaron daños en una unidad de la AEI y otra más de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) estatal.
Guadalupe y Calvo, localizado al sur de Chihuahua, es un municipio que desde el año 2020 se convirtió en escenario de una disputa entre las organizaciones criminales de Los Salgueiro —afín al Cártel de Sinaloa— y La Línea —emanada del Cártel de Juárez—.
(Agencia)