El presidente surcoreano, Yoon Suk-yeol, no asistirá a la primera audiencia del juicio de destitución por motivos de seguridad, escribe la agencia ‘Yonhap’, citando al abogado presidencial, Yun Gap-geun. Mientras tanto, los investigadores siguen intentando ejecutar una orden de detención contra el mandatario.
«Dado que se está intentando ejecutar ilegalmente una orden de detención ilegal e inválida, existe preocupación por la seguridad personal y los percances», comunica Yun Gap-geun.
Para que el presidente asista al juicio, se debe resolver la cuestión de la seguridad personal, agrega el abogado.
La primera audiencia formal de destitución de Yoon se celebrará el 14 de enero, y las siguientes rondas están programadas para los días 16, 21 y 23 de enero y 4 de febrero, detalla la agencia Xinhua.
El 3 de diciembre, el mandatario surcoreano decretó la ley marcial en el país para evitar ser destituido y acusó a la oposición de simpatizar supuestamente con Corea del Norte, una afirmación que las fuerzas opositoras tacharon de «ridícula». Yoon cerró el Parlamento, prohibió las actividades de los partidos políticos y puso los medios de comunicación bajo control de los militares.
Ese mismo día, la mayoría de los diputados lograron entrar en la Asamblea Nacional y votaron a favor del levantamiento de la ley marcial, decisión que Yoon tuvo que aceptar finalmente.
El 14 de diciembre, la Asamblea Nacional de Corea del Sur apoyó la destitución del mandatario actual, con 204 votos a favor y 85 en contra.
El 3 de enero, los fiscales surcoreanos intentaron ejecutar la orden de detención contra el mandatario suspendido, pero se vieron obligados a desistir tras más de cinco horas de enfrentamiento con los guardias presidenciales.
Actualmente, Yoon es investigado por presuntos delitos de traición, rebelión y abuso de poder. También están bajo investigación el ahora exministro de Defensa Kim Yong-hyun y altos mandos de las Fuerzas Armadas surcoreanas. Sputnik