La organización médica humanitaria internacional Médicos Sin Fronteras (MSF) condenó la prohibición de las autoridades de Afganistán de que las mujeres estudien profesiones médicas, considerándola una seria amenaza para el sistema de salud del país.
El líder supremo de Afganistán, Haibatulá Ajundzada, emitió antes un decreto que prohíbe a las mujeres asistir a las instituciones educativas superiores y secundarias en el ámbito médico, informó el canal televisivo Tolo News. El Ministerio de Salud afgano comunicó a los responsables de las instituciones médicas que a las mujeres ya no se les permitirá estudiar en dichas instituciones.
«Es imposible que un sistema de salud funcione sin mujeres médicas formadas (…) En MSF, el 50% de nuestro personal médico son mujeres. La decisión de las autoridades afganas de prohibir que las mujeres estudien en los institutos médicos les priva tanto de recibir educación como de brindar atención médica», indicó la oficina de MSF en Kabul en una declaración.
Subrayó que, si se impide a las niñas asistir a la escuela secundaria y a las mujeres acceder a las universidades o institutos médicos, será imposible formar a futuras médicas, lo que plantea la inquietud sobre quién podrá atender a las mujeres afganas en sus momentos de mayor vulnerabilidad.
En opinión de MSF, la decisión de las autoridades afganas no solo limita el desarrollo personal de las mujeres, sino que también afecta el funcionamiento general del sistema de salud del país.
«En vista del ya reducido número de mujeres trabajadoras en el sector médico de Afganistán, esta prohibición dificulta aún más el acceso a la atención sanitaria, especialmente debido a la segregación de género en los hospitales», señaló MSF, destacando que esta situación agrava los problemas del sistema de salud del país.
MSF enfatizó la urgente necesidad de incrementar el número de mujeres médicas en Afganistán para responder a las crecientes necesidades del país en términos de atención médica. Sputnik
