Los presidentes de Rusia y Bielorrusia, Vladímir Putin y Alexandr Lukashenko, firmaron un tratado sobre garantías de seguridad en el Estado de la Unión.
La ceremonia oficial de la firma del documento tuvo lugar al margen de la reunión del Consejo Supremo del Estado de la Unión en la capital bielorrusa, Minsk.
Poco antes, el mandatario ruso que está de visita en Minsk se mostró seguro de que dicho tratado «permitirá proteger de forma fiable la seguridad de Rusia y Bielorrusia», así como creará condiciones para el próximo desarrollo pacífico y estable de los dos Estados.
Según Putin, el documento «define los compromisos mutuos de la alianza para la defensa, la protección de la soberanía, la independencia y el orden constitucional» de ambos países.
Agregó que garantizará también la inviolabilidad de la integridad territorial de Rusia y Bielorrusia con el uso de todas las fuerzas y medios disponibles, al enfatizar que se trata «de las armas nucleares tácticas rusas».
Rusia y Bielorrusia aumentan la cooperación en el sector de defensa y seguridad
Rusia y Bielorrusia intensifican la cooperación en el ámbito de defensa y seguridad, destacó Putin.
«Rusia y Bielorrusia están aumentando también la cooperación en el campo de defensa y seguridad, (…) y en el ámbito técnico-militar, lo que, sin lugar a dudas, responde a los intereses fundamentales de nuestros países y pueblos», constató.
El mandatario ruso señaló que para proteger el espacio del Estado de la Unión, funciona un sistema único de defensa antiaérea y se mantienen contactos entre los cuerpos de seguridad; además, fue creada una agrupación regional de tropas y renovada la doctrina nuclear.
A su vez, el Consejo de Seguridad de Bielorrusia aseguró que las armas nucleares tácticas de Rusia desplegadas en el país constituyen un medio para disuadir potenciales agresiones por parte de los Estados vecinos.
«Las armas nucleares tácticas de Rusia desplegadas en el territorio bielorruso no son para amenazar a los países vecinos, sino para disuadir intenciones agresivas», dijo el secretario del organismo, Alexandr Volfóvich, en una comparecencia ante la prensa.
El funcionario remarcó que los países vecinos se arman activamente, modernizan su infraestructura bélica, la OTAN intensifica sus maniobras militares en Europa, concentran gran cantidad de tropas cerca de las fronteras de Bielorrusia y crece la cantidad de vuelos de los aviones espías a lo largo de la frontera bielorrusa.
¿Oreshnik en Bielorrusia?
El presidente de Bielorrusia pidió a su homólogo ruso desplegar nuevos sistemas de armamento, incluido Oreshnik, en el territorio bielorruso.
«Recientemente, Rusia realizó un exitoso lanzamiento de prueba del sistema Oreshnik, lo que ejerció determinada influencia sobre nuestros rivales. Pues quiero pedirle, públicamente desplegar los nuevos sistemas de armamento, incluido Oreshnik, en el territorio de Bielorrusia», dijo Lukashenko.
En sus palabras, esto calmaría seriamente algunas mentes, que ya están dispuestas a luchar contra Bielorrusia e «igualmente contra Rusia en el territorio de Bielorrusia, según el concepto de seguridad nacional [del Estado de la Unión], que se firmó recientemente».
Vladímir Putin, a su vez, considera posible el despliegue del Oreshnik en Bielorrusia en la segunda mitad de 2025.
«Dado que hoy firmamos un tratado sobre garantías de seguridad con el uso de todas las fuerzas y medios disponibles, considero posible el despliegue de sistemas como Oreshnik en el territorio de la República de Bielorrusia (…). Creo que esto será posible en la segunda mitad del próximo año», aclaró el mandatario ruso.
Antes de enviar Oreshnik a Bielorrusia, especificó el líder ruso, es necesario resolver una serie de cuestiones técnicas, entre ellas la determinación del alcance mínimo.
Putin también señaló que el despliegue de Oreshnik requerirá costos mínimos debido al legado infraestructural de Bielorrusia procedente de la Unión Soviética.
Los sistemas en cuestión entrarán en servicio en Rusia y al mismo tiempo se suministrarán a Bielorrusia, agregó el mandatario.
«Por supuesto, a pesar de que formarán parte de las Tropas de Misiles de Designación Estratégica de Rusia, sin embargo, corresponderá sin duda a la dirección militar y política de Bielorrusia determinar los objetivos en el territorio de un probable enemigo», constató Putin.
En respuesta al uso de armas estadounidenses y británicas por las FFAA ucranianas, el 21 de noviembre Rusia lanzó un ataque combinado contra una instalación del sector militar ucraniano, probando un nuevo misil balístico de alcance intermedio, Oreshnik, en configuración hipersónica sin armas nucleares.
En su alocución televisada, Vladímir Putin advirtió que Rusia decidirá sobre un mayor despliegue de misiles de mediano y corto alcance, y fijará los blancos a destruir durante los ensayos adicionales de esas armas «en función de las acciones de EEUU y sus satélites». Sputnik