Para evitar posibles acciones de violencia, las oficinas electorales de Estados Unidos (EE.UU.) han aumentado las medidas de seguridad, a menos de 24 horas del inicio de los comicios presidenciales.
Medios locales afirman que cientos de oficinas han sido reforzadas con vidrios a pruebas de bala y con puertas de acero; mientras otras han aumentado sus dispositivos de seguridad y sus trabajadores han bloqueado sus cuentas en redes sociales, para evitar posibles espionajes.
De igual manera, numerosas oficinas han instruido a sus empleados con tácticas para hacer frente a posibles actos de violencia, y les han dotado de herramientas para diagnosticar posibles ataques y los protocolos a seguir, por temor a recibir polvos opiáceos por correo.
Mientras en los estados de Nevada y Washington la Guardia Nacional fue activada, el condado de Maricopa, en Arizona, ha instalado drones para detectar posibles amenazas, y además, se considera el despliegue de francotiradores.
En esta localidad, en las elecciones de 2020 se instalaron personas a protestar en las afueras de la oficina, mientras se contaban los votos.
De igual manera, a la Casa Blanca le fue colocada una valla adicional que se mantendrá hasta el próximo 20 de enero, cuando tome posesión el próximo presidente estadounidense.
Las autoridades estadounidenses han mostrado preocupación ante el auge del movimiento negacionista en EE.UU., que emergió tras la victoria del actual mandatario, Joe Biden. A ello se suman declaraciones del candidato republicado Donald Trump, quien no se ha comprometido a aceptar el resultado de los comicios.
En ese sentido, la secretaria de estado de Michigan, Jocelyn Benson, afirmó que la preocupación por su seguridad personal aumentó luego de que el propietario de la red social X, Elon Musk, la atacara en línea.
Por su parte, el secretario de estado demócrata en Arizona, Adrian Fontes, reveló hace unos días que lleva un chaleco antibalas.
Mientras, el pasado martes, la jefa de policía de Washington D.C., Pamela Smith, subrayó que en el contexto de las elecciones, más de 3.000 agentes de policía trabajarían turnos de 12 horas. Telesur
