En el marco de la contienda por la presidencia nacional del PAN, los candidatos Adriana Dávila y Jorge Romero debatieron este miércoles en el foro Ideas para fortalecer al PAN, organizado por la Comisión Organizadora Nacional de la Elección 2024 (Conecen).
Los aspirantes a la presidencia del PAN presentaron sus propuestas ante la militancia, en un foro virtual que se realizó en León, Guanajuato, y destacaron sus visiones para enfrentar los retos del partido, fundamentalmente en materia de reconstrucción, luego que este instituto político ha venido a menos en las últimas décadas.
Adriana Dávila, aspirante a liderar el Comité Ejecutivo Nacional del PAN, presentó una propuesta enfocada en la «reconstrucción democrática” del partido. Señaló la urgencia de transformar al instituto tras los pobres resultados electorales de junio, mencionando que alianzas mal gestionadas y una dirigencia centrada en intereses personales los perjudicaron.
Dávila abogó por un PAN firme y responsable, capaz de ofrecer una alternativa sólida a los ciudadanos. Entre sus propuestas, destacó la necesidad de fortalecer la estructura interna del partido, aumentando el número de comités municipales y revitalizando la participación juvenil, que actualmente representa solo el 3 por ciento del padrón del PAN.
Asimismo, subrayó la importancia de no descuidar la defensa de las casillas electorales, atribuyendo los fracasos recientes a la falta de representación adecuada, lo que permitió la sobrerrepresentación de Morena. Dávila también hizo un llamado a las mujeres del PAN a liderar con su propio nombre y encabezar proyectos, sin depender de concesiones.
En su última intervención Dávila reprochó la ausencia del partido en diversos estados como Chiapas, donde fue asesinado el religioso Marcelo Pérez, así como en Guerrero donde no se defiende a sus habitantes por los desastres naturales que no han sido atendidos.
También, criticó la postura de varios legisladores panistas que apoyan al régimen actual. Finalmente dijo que lo peor que le puede pasar a una oposición es que la desdeñen, mientras se comprometió a hacer de un PAN un partido respetable.
Jorge Romero presentó una visión centrada en la unidad, apertura y autocrítica. En su discurso, Romero insistió en que el PAN debe abrirse más a la ciudadanía, simplificando el proceso de afiliación y regresando a un sistema donde las candidaturas se decidan principalmente por elecciones internas. Además, propuso limitar las designaciones a casos excepcionales y que el presidente del partido no busque candidaturas sucesivas para enfocarse en la dirigencia.
Romero también señaló la importancia de reflexionar sobre las alianzas políticas, admitiendo que, aunque han sido necesarias, en algunos casos diluyeron las causas del PAN. Insistió en la necesidad de un partido más competitivo que recupere su esencia.
Finalmente, hizo un llamado a la unidad de cara a los próximos desafíos electorales: “El PAN no está derrotado, porque los hombres y mujeres que formamos este partido jamás dejaremos de luchar por México”. Romero subrayó que, a pesar de las dificultades, el PAN debe enfrentarlas con valentía y convicción, sin temor a las críticas o ataques del actual régimen.
Ambos candidatos coincidieron en la necesidad de fortalecer al PAN, pero presentaron visiones distintas sobre cómo hacerlo. Mientras Dávila enfatiza una reconstrucción democrática y un enfoque en las bases, Romero aboga por la unidad y una mayor apertura. La militancia tendrá la última palabra el próximo 10 de noviembre, cuando se lleve a cabo la elección por la presidencia nacional del PAN.
