De acuerdo a un reporte publicado por el ‘Wall Street Journal’, miembros del equipo de la candidata presidencial creen que ni su plataforma ni su discurso han logrado conectar con el electorado de clase obrera en estados que históricamente han votado por el Partido Demócrata, poniendo en riesgo un potencial triunfo en las elecciones de noviembre.
La nota, titulada «Los demócratas creen que Kamala Harris tiene problemas para conectar con la clase trabajadora», asegura que mientras el candidato republicano, el expresidente Donald Trump, ha buscado activamente el voto de ese electorado, históricamente alineado con el partido gobernante, la actual vicepresidenta no ha logrado ganarse su respaldo de cara a los próximos comicios.
«Donald Trump ha cortejado asiduamente a los sindicalistas y a los votantes blancos sin educación universitaria con un mensaje centrado en la alta inflación y la manufactura (…). Los demócratas de alto rango, incluida la gobernadora de Michigan, Gretchen Whitmer, quieren un discurso económico más claro por parte de Harris y han transmitido esas preocupaciones a su campaña, según personas familiarizadas con estas conversaciones», asegura la nota.
En ese sentido, el WSJ afirma que los dirigentes demócratas del estado de Michigan han instado a la campaña de Harris a buscar más agresivamente el voto de trabajadores automotrices y de clase obrera, y también han pedido que la candidata dedique más tiempo a hacer campaña en el estado. Michigan forma parte del llamado Muro Azul, un grupo de estados que generalmente ha votado por el abanderado demócrata (partido identificado con ese color) en cada elección presidencial.
De acuerdo a la nota, otros altos funcionarios del partido le han sugerido a Harris tener un discurso más «populista», y han puesto el ejemplo de las propuestas del senador Bernie Sanders, quien aboga por el aumento del salaio mínimo y subir los impuesto a los empresarios y las personas ricas.
«Encuestas recientes muestran que Harris y Trump están básicamente empatados en Michigan, Pensilvania y Wisconsin. Ganar el Muro Azul, junto con el segundo distrito del Congreso de Nebraska, sigue siendo el camino más fácil de Harris para obtener los 270 votos en el Colegio Electoral», señala la nota, en alusión al sistema para elegir al presidente en EEUU, al no tratarse de una democracia directa.
El artículo apunta que una encuesta interna realizada por la campaña de la senadora demócrata Tammy Baldwin arrojó que Harris perdió 3 puntos en Wisconsin durante las últimas semanas, mientras que Baldwin subió dos puntos.
Una fuente con conocimiento del sondeo dijo al diario que gran parte de la pérdida de fuerza electoral de Harris en el estado se debe al apoyo a los republicanos entre los hombres sin educación universitaria.
Otras de las razones de preocupación de la campaña de Harris es que la actual vicepresidente no ha logrado repetir el apoyo de los sindicatos que obtuvo el entonces candidato Joe Biden en 2020.
Además, los republicanos han sabido atacar las debilidades de Harris al centrar sus anuncios en que la demócrata, en campañas pasadas, ha promovido la producción de vehículos eléctricos (Michigan es el estado que concentra la mayor producción automotriz de EU) y ha estado en contra del fracking, una actividad que emplea a decenas de miles de trabajadores en Pensilvania, otro territorio en disputa clave.
Si bien la demócrata ha renegado de esas posturas en su actual campaña, en la que ha buscando tener un perfil más centrista, la campaña de Trump ha recaldado que Harris no es una política confiable y que suele cambiar de opinión según su conveniencia electoral. Sputnik