Por Edmundo Cázarez C
-Segunda de tres partes-
Foto Adrián Ponce
Por cosas de la vida, Enrique Burak, prestigiado y extraordinario comentarista deportivo, nace un 2 de agosto de 1964 en San Luis Potosí, pero a los tres meses de su llegada al mundo, su familia se ve en la imperiosa necesidad de mudarse a la Ciudad de México, debido a cuestiones laborales de su papá, quien trabajaba para Grupo Vitro. Desde muy pequeño, mostró su pasión por los deportes. Gracias a la cercana amistad que existía entre Fernando Schwartz y la familia de mi entrevistado, logró establecer el “click” que le permitió vincularse con el área de deportes del entonces Canal 8 de Televisa, que posteriormente cambio a Canal 9, ante el surgimiento de XHIMT Canal 7 de Imevisión, para evitar interferencias en las señales de ambos canales.
Fernando Schwartz, quien tenía a su cargo la sección de deportes de 24 HORAS con Jacobo Zabludovsky, decide llevarlo a Televicentro para que conociera y comenzara a familiarizarse con todo el engranaje de la Dirección de Noticieros y Eventos Especiales de Televisa y comenta: “Los tiempos de Dios son perfectos, resulta que hablan de la dirección general de Canal 8 para la creación de un programa que se llamaba Reporte Juvenil, que se transmitía los sábados por la mañana, con la conducían de Octavio Fernández de Teresa y Leticia Gurayeb, en donde necesitaban a un chavito que apenas estuviera empezando… ¡y yo daba ese perfil!!”
De esta manera, fue como le asignan la sección “Deporte juvenil”, enfocada al deporte amateur, no obstante que, él, se había convertido en un asiduo seguidor del deporte profesional. Sin lugar a dudas, era una prueba de fuego, la información deportiva amateur siempre ha sido a cuenta gotas ni se contaba con fuentes. No le quedaba de otra que batallar. Con entrega y dedicación, pudo realizar un muy buen trabajo y empezar, con el pie derecho, su brillante carrera dentro de la televisión en 1982.
Con una impresionante trayectoria de más de 40 años, Enrique Burak ha tenido la fantástica oportunidad de participar en infinidad de programas y noticieros de radio y televisión, destacando la cobertura de 30 Super Bowls, 27 Series Mundiales de Beisbol, 9 Series Finales de la NBA, 8 Juegos Olímpicos de Verano, 4 Juegos Olímpicos de Invierno, 3 Juegos Panamericanos, 4 Mundiales de Atletismo, 1 Mundial de Gimnasia, y por si fuera poco, 17 Temporadas de la Liga Mexicana de Beisbol, Temporadas Regulares de la NFL, incluyendo Juegos del Salón de la Fama. Desde 1984 a la fecha, todas las Series de Campeonato de las Ligas Americana y Nacional de Futbol Americano. Así como Copas Mundiales de Clavados y Copas Davis de Tenis.
Su inagotable actividad periodística parece no tener límites, desde los 18 años de edad, ha tenido a su cargo la conducción de las secciones deportivas de diversos noticieros de televisión, tales como “6 En Punto” con Alfonso Teja, “ECO” con Jorge Berry, “24 HORAS” con Abraham Zabludovsky, “El Noticiero” con Lolita Ayala, entre otras muchas más.
En lo referente a su incursión dentro de la radio, su inicio fue a través de la señal de Grupo Rasa, con la exitosa conducción del programa “Por la Senda del Deporte”, con una permanencia al aire desde 1990 hasta 2000.
En 1997, ingresa a Grupo Fórmula participando en diversos proyectos. Actualmente, sus gustadas secciones en “Ciro por la Mañana”, con Ciro Gómez Leyva, y “La Fórmula Es…”, con Raúl Orvañanos, son de las más escuchadas por miles de seguidores en México y todo el mundo, vía internet
En esta segunda parte de la amena e interesante conversión que concedió a MISIÓN POLÍTICA, sostiene: “Para ser un verdadero cronista deportivo, se requiere una auténtica pasión por el trabajo que se realiza. Durante los últimos 40 años, me ha tocado ver un desfile de “periodistas deportivos”, tanto en la tele como en los medios de comunicación, que no tienen el mínimo respeto hacia el televidente o el radioescucha, llegan al palco de transmisiones preguntando ¿Qué equipo es este?, denotando una total falta de conocimiento y preparación”
-Nos quedamos en tu paso por la prepa… ¿A dónde te ibas de “pinta”?
-Fíjate que no recuerdo haberme ido de “pinta”, lo que sí tengo presente, como esas cosas emocionantes, era cuando pasaba el camión de la escuela y como vivíamos en la calle de Concepción Beistegui, mi escuela estaba ubicada en la calle de San Lorenzo número 290, que ahora, es la Universidad de la Ciudad de México, nos íbamos caminando a la escuela, mi hermana, mi vecino Isaac y yo, veíamos pasar el camión de la escuela con todos mis compañeros y nos saludábamos como si se fueran de viaje… ja, ja, ja.
– ¿Naciste en pañales de seda, lo que ahora llaman ser niño fifí?
-No mi estimado Edmundo… ¡No nací en pañales de seda!!, la verdad, es que mi papá no ganaba mucho dinero…
– ¿Durante el periodo de vacaciones te llevaban de viaje?
– ¡Uff!!… ¿durante las vacaciones, haber viajado? ¡Híjole!!, lo único que viene a mi memoria, es habernos ido de viaje a Acapulco varias veces, en uno de esos viajes, por cierto, no fue mi papá con nosotros.
– ¿Y al extranjero?
-Cuando tenía 8 años, hicimos un viaje a España. Resulta que la tía de mi mamá, ya era una señora grande, fuimos a visitarla… ¡Ese fue el viaje más “guau” que te puedes imaginar
– ¿Qué sentiste cruzar el “charcote” siendo un niño?
-La verdad, era algo completamente nuevo para mí, subirme a un avión, hasta me resultaba muy padre. Además, era la primera vez que salía de mi país, porque los viajes Acapulco eran en coche. Posteriormente, hicimos un viaje a California, Estados Unidos y que jamás se me va olvidar, fue uno que mi mamá adquirió mediante una agencia de viajes, visitando 75 ciudades en tres días -tronándose los dedos exclama- “andábamos de arriba para abajo en un autobús…” -En ese preciso momento, se escuchan truenos del tremendo aguacero que estaba cayendo al poniente de la Ciudad de México en donde está ubicado Grupo Fórmula y me dice-: “¡Se va a caer el cielo!! Retomando tu pregunta, ahorita que me acuerdo, también pasaba muchas vacaciones en Toluca, porque ahí vivía la hermana de mi mamá…”
– ¿En esa Toluca tranquila y pacífica, te daban ganas de andar en bicicleta y patineta?
-Ya que lo mencionas, ahí fue en donde aprendí andar en bici y cosas por el estilo… ¿Pero haber nacido en pañales de seda?… ¡No, para nada!! Me acuerdo que siempre vivíamos en casas rentadas, tanto en Luz Saviñón como en Concepción Beistegui, hasta que los dueños de ese edificio optaron por vender y quien quisiera comprar…
– ¿Y qué sucedió?
-Si no me falla la memoria, creo que toda la familia, le echaron la mano a mi papá para que comprara ese departamento…
– ¿Cómo era el adolescente Enrique Burak y cómo fue su comportamiento?
-Creo que mi adolescencia y pubertad, fue una combinación entre secundaria y prepa. Ya salía un poquito más a la calle en compañía de mis amigos más cercanos de esa época, Carlos y Nathan, nos reuníamos los viernes o sábados.
– ¿El primer cigarrito o la primera chela?
-Ja, ja, ja, me gusta cómo rompes la monotonía. ¿La primera chela?… Mmm… creo que fue cuando…
-Ese tipo de escuelas de judíos, son mucho muy estrictos verdad…
– ¡En efecto!! Cuando termino la secundaria e ingreso a prepa, se estilaba realizar un viaje de convivencia durante seis semanas que, en realidad, era como más de turismo…
– ¿A dónde era ese viaje?
-A Israel, haciendo base en un determinado lugar. Así es que fuimos a Tel Aviv, Jerusalén y otros lugares más. Y en una de esas noches de fiesta… ¡había cervezas!!…
– ¿Qué edad tenías…?
-Acababa de cumplir 16 años. Total, me tomé lo que eran mis primeras chelas…
– ¿Te pusiste todo “happy”?
-Digamos que solamente me sentí un poco mareado…
– ¿Sin llegar a la “peda”?
-No, la verdad es que no. Ahora que lo mencionas, borracheras brutales de las que tenga memoria, quizás una, creo que fue cuando terminé la prepa. Se organizó una reunión, ahí sí, para que veas, me puse “borrachísimo”, cuando ingerí varias “cubas”, me sentí totalmente mareado para terminar vomitando y vomitando… ¡fue horrible, fue horrible!!
– ¿Y hoy en día, siendo ya un adulto mayor?
-Pues fíjate que no. Hasta la fecha, las “cubas” me dan asco, además, la cerveza no me gusta.
-Bueno, mejor cuéntame cómo fue tu paso por la prepa…
-Completamente más dedicado…
– ¿Ya tenías definida tu vocación hacia el futuro?
-Sí, estando en tercero de prepa, ya sabía que me quería dedicar a esto de los medios de comunicación…
– ¿Por qué?
-Ahí, ya fue mucho más fuerte el asunto que me quería dedicar a la comunicación porque me encantaba el deporte
-A lo Mero Macho ¿Cuál fue el detonante para que te dedicaras a la comunicación, porque veías a Joserra en Imevisión -Hoy TV Azteca-?
-A José Ramón Fernández, lo seguía mucho en su programa “DeporTV” de Imevisión, así como a Raúl Orvañanos, pero siempre, jalé mucho más en mis afectos personales, es decir, siguiendo las transmisiones deportivas de Televisa.
– ¿Por qué?
– ¡No lo sé!!, creo que fue algo que se dio en mí, poco a poco. Quizás, porque, como te contaba, hacia mis propios programas con mi pequeña grabadora y utilizaba el tema del programa “Acción” de Televisa.
– ¿Te costó mucho trabajo elegir, como deshojar la margarita?
– ¡Qué pregunta tan interesante!!, te repito, creo que fue algo que se dio poco a poco y hasta el punto en que tenía que elegir…
– ¿…Y?
-Pues me decidí por el Área 3, en la que estaba clasificada comunicación. Pero también, hubo un momento…
– ¿Dudaste entrar a la universidad…?
– ¡Vaya!!, me sorprendes. No es que no quisiera entrar a la universidad, sino que me invadía la duda de estudiar otra cosa que fuera como de respaldo…
– ¿…Cómo qué?
– ¡Contaduría!!…
– ¿Dudabas de ti mismo?
-Era algo natural, ponerme analizar y sin tener la seguridad de poder conseguir o no, una chamba dentro de la comunicación.
– ¿Quién te dio “chance” de probar suerte en los medios?
-Fíjate que conocía a Fernando Schwartz, era amigo de la familia y compañero de generación de una prima, coincidiendo en eventos familiares a los que acudía Fernando.
– ¿Qué edad tenías tú?
– ¡14 años! Me acuerdo que estaba en desarrollo el Mundial de Futbol Argentina 78 y Jorge Berry era el titular de la sección deportiva del noticiero 24 HORAS de Jacobo Zabludovsky, pero Jorge Berry estaba en Argentina cubriendo para 24 HORAS todo lo del mundial, por lo tanto, Fernando Schwartz estaba haciendo la sección deportiva con Jacobo.
– ¿Qué impresión tenías de él?
-Me tenía muy sorprendido porque estaba mucho muy chavito, creo que tenía entre 17 y 18 años de edad. En una de esas reuniones familiares, aprovechando que Fernando Schwartz estaba ahí, toda mi familia sabia perfectamente que me gustaba todo eso… ¡y que me sientan junto a Fernando…!!
– ¿Qué sentiste estar junto a él porque lo veías en la tele?
-La verdad, literalmente, me temblaban hasta las rodillas de la emoción
– ¿Te hiciste “pipí”?
– ¡No!!, sino que me armé de valor, le dije que me gustaba todo lo que tenia que ver con el deporte y la comunicación.
– ¿Y qué te dijo?
-Que estaba mucho muy chavito, que le echara un telefonazo más adelante…
– ¡Vaya historia!! ¿Pensaste que Schwartz te había dado “el avión”?
– ¡Espérame tantito!!, resulta que estando en el lapso de segundo para entrar a tercero de prepa, le hablé a Fernando Schwartz y me dice que sí… ¡Wooow!!, sin pensarlo ni un minuto más, comienzo ir a Televisa.
– ¿Cuéntame cómo fue ese primer día que fuiste a Televisa y qué diablos pasaba por tu mente al ver todo el engranaje de noticieros que encabezaba Jacobo Zabludovsky?
-Por principio de cuentas, no me dejaban entrar…
– ¿Por qué?
– ¡Porque estaba muy chico de edad, además, en recepción de Niños Héroes 27, había una señora mucho muy dura, finalmente, me dejaron entrar cuando Fernando fue por mí.
– ¿Cómo fue ese trato con Schwartz cuando ya estabas en su oficina?
-Un trato mucho muy amable, atento y respetuoso conmigo. Convenimos que iría por las tardes, saliendo de la prepa.
– ¿Qué te ponían hacer?
-Todo era aprendizaje para mí. Me enseñaron a redactar. Era aquella época en que te pasaban los famosos cables que llegaban a través de télex de las agencias de noticias y te llenabas las manos de papel carbón.
– ¿Ya sabías escribir en máquina?
– ¡No!!, tuve que aprender a escribir “de dedito”, en aquellas enormes máquinas mecánicas Olivetti, redactar en los también famosos “ditos”. Le pasaba a Fernando lo que había escrito para que me corrigiera…
– ¿Cuál era su actitud?
-Fue sumamente paciente conmigo. Me decía que le cambiara esto y aquello, esto súbelo y esto bájalo… en fin.
– ¿Salías con los reporteros para aprender cómo hacían sus notas?
– ¡Por supuesto!!, me permitían ir con los reporteros cuando había “chance”
– ¿Recuerdas con quiénes fuiste?
-Con Arturo Rivera, Noel Cárdenas, Nuria Basurto, Addiel Bolio y Toño de Valdés, grandes reporteros de aquella época que integraban la redacción de deportes, que era… -Extendiendo los brazos, con sus manos, define el tamaño que tenía la redacción de deportes de Televisa en aquella época en que comenzó su aprendizaje- “Era un poco más chiquita que esta reducida sala de juntas en la que estamos ahorita. Me acuerdo perfectamente que nada más había tres escritorios, uno era para Fernando, otro lo ocupaba Aidé, quien era la secretaria, y el último, lo utilizaba Gerardo Peña…”
-A lo Mero Macho, ¿qué sentías estar ahí?
-Era algo totalmente increíble. De pronto, era poder ir al Teatro Estudio “A” Paco Malgesto, que se cayó en el temblor del 85, en donde se grababan aquellos programas como “Mi Secretaria”, “La Carabina de Ambrosio”, “El Gran Premio de los $64,000”, “Siempre en Domingo” con Raúl Velasco, como no tenía mucho que hacer, me daba mis vueltas para presenciar como grababan los programas, aunque otros, eran “en vivo” Era una delicia para mí, como si estuviera en un cine, pero todo “en vivo”
– ¿Creías estar soñando, pero testigo presencial de lo que se transmitía en la tele?
– ¡Ándale!! También iba a unos estudios muy chiquitos, los KLM, en donde se hacían algunos noticieros y las cápsulas de los cortes informativos.
– ¿Pero ¿cómo te involucras y logras que te dieran chance de probar tu voz y narrar?
-Eso, sucedió un domingo. En uno de los pasillos de Televisa me encontré con Fernando Von Rossum, quien, para mí, era uno de los mejores cronistas del futbol americano que tenía Televisa, vamos, la NFL en persona. En eso, Fernando me dice… ¡Hey… qué tal joven!!…
– ¿Ahora sí, como dice el dicho… “Sentías que la Virgen te hablaba…?
-No podía dar crédito que me estuviera hablando a mí…
– ¿Qué pensaste?
-Me quedé helado y sin saber qué decirle…
– ¿Pero ¿cuál fue tu rección?
-Por dentro me dije… ¡En la madre!!, lo primero que se me ocurrió fue decirle que estaba ahí tratando de aprender. La respuesta de Fernando fue de inmediato y me dijo: “Pues aquí, vas aprender porque si vas a tratar, mejor vete para tu casa…”
– ¡Sopas!!, más claro ni el agua…
-A partir de ahí, mi transitar por los pasillos de Televisa Chapultepec se incrementaron notablemente, era conocer más gente. Así es que, terminando tercero de prepa, en el Centro Israelita de México, se organizaba un viaje de fin de prepa…. ¡todo un año a Israel…!!
– ¿Y qué hiciste?
-Me dije, Enrique, ya estás aquí, además, había empezado con el pie derecho en Televisa y deseché ir al viaje a Israel.
– ¿Cuál fue la primera nota que te encomendaron como reportero de deportes?
-Déjame terminar la idea de tu pregunta anterior, no iba a dejar ir una valiosa oportunidad por un viaje de placer con mis compañeros de prepa. Era mi futuro y lo que me apasionaba. A partir de ese momento, estuve seis meses aprendiendo en Televisa hasta que entré a la universidad.
– ¿Te pagaban?
– ¡No!!, porque estaba en calidad de “aprendiz” Pero dime: ¿Quién demonios te da esa valiosa y única oportunidad? Por cierto, todavía era Canal 8, porque luego cambió a Canal 9, para evitar interferencias en las señales, ante el surgimiento de XHIMT Canal 7 de Imevisión.
– ¿Te dijiste… de aquí soy?
– ¡Definitivamente!! Fernando Schwartz fue quien me arropó…
-Los tiempos de Dios son perfectos…
Tienes mucha razón en eso, todo coincidía a la perfección. Hablan de la dirección general de Canal 8 para la creación de un programa que se llamó Reporte Juvenil, que se transmitía los sábados por la mañana, lo conducían Octavio Fernández de Teresa y Leticia Gurayeb, pero necesitaban un chavito que apenas estuviera empezando… ¡y yo daba ese perfil!!
-A lo Mero Macho, ¿ni tu mismo te la creías?
-No la verdad es que no, fue Fernando Schwartz quien me conectó y apoyó decididamente.
– ¿Qué tenia de especial ese programa?
-Que no se hacia dentro de un estudio como tal, sino que se grababa en muy distintas locaciones. El primer programa lo hicimos en el Castillo de Chapultepec…
– ¿De qué era tu sección?
-Se llamaba “Deporte juvenil”, puro deporte amateur, cuando yo había seguido puro deporte profesional, además, la información deportiva amateur siempre ha sido a cuenta gotas, mucho menos, había fuentes y batallaba un poquito, pero bueno, creo que pude realizar un buen trabajo… ¡así fue como empecé mi carrera dentro de la televisión en 1982!!
– ¿Te daban “ñáñaras” salir a cuadro?
-Estaba totalmente novato y todo era aprendértelo de memoria…
-No te puedes quejar, tienes una memoria prodigiosa…
-No es para tanto, muchas gracias, creo que está más o menos…
– ¿Cómo le hacías para no equivocarte?
-Iba y hablaba como a dos por hora… ja, ja, ja.
– ¿Te saliste con tu necedad de estudiar Contaduría?
-Sí, para ello, ingresé a la Escuela Bancaria y Comercial…
– ¿Por qué demonios lo hiciste si en Canal 8 te estaba yendo de lujo?
-Por influencia de mi papá
– ¿Te exigían una carrera como base sólida y después podías hacer lo que quisieras?
-Eso, nunca me dijeron … ¡Tienes que hacer esto!!
– ¿Qué te ibas a morir de hambre de periodista?
-Ja, ja, ja, tampoco me lo dijeron. Nada de eso mi querido Edmundo…
– ¿Fiel a tus convicciones?
– ¡Eso!! Yo mismo me decía una y otra vez, que no necesitaba estudiar comunicación y reflexioné que necesitaba un soporte profesional de carrera. Mi mejor amigo Carlos Gradwohl, quien también estudió Contaduría, así es que, como tenia varios alicientes, la influencia de mi papá, mi mejor amigo que estaba estudiando eso, así es que decidí por esa carrera de Contaduría.
– ¿Y la haz ejercido?
-Fíjate que hasta en eso he tenido mucha suerte, porque se trata de una carrera muy práctica. Me iba a la EBC de las 7 a las 11 de la mañana, saliendo de clases, agarraba el Metro en la Glorieta Insurgentes con dirección a Balderas, en cosa de diez minutos ya estaba en Televisa Chapultepec.
-Pero no me has dicho si ejerciste o no…
-A partir del quinto semestre de la carrera, aprovechando que es una carrera muy práctica, los grupos nada más eran en la tarde, porque la mayoría de los chavos trabajaban en la mañana e iban agarrando experiencia, ya en la tarde, hacían lo demás.
– ¿Cómo le hacías para que el tiempo te alcanzara en la tele?
-En efecto, yo me decía: ¡En la torre!!, porque para esas alturas, ya estaba haciendo transmisiones de la Liga Mexicana de Beisbol en Radio y se me complicaba mucho.
-No cabe duda que eres un hombre muy afortunado…
-Pasando de cuarto a quinto semestre de la carrera, abrieron un grupo por la mañana, así fue como pude llegar hasta el octavo semestre
– ¿Cómo fue tu debut en radio?
-Debo confesar que empecé al revés…
– ¿Cómo está eso…?
-Es que, regularmente, primero se hacía radio y luego tele, y yo, comencé haciendo tele y luego radio. Me acuerdo que había un excelente productor, Toño Rocha, quien era el responsable de elaborar las programaciones de los comentaristas.
– ¿Qué sentiste que te hayan designado para cubrir transmisiones de los Juegos Olímpicos del 84?
-Antes que nada, un gran honor…
– ¿Cómo fue que sucedió?
-Me acuerdo que estaba en la redacción en Televisa para el resumen de la noche junto con Pepe Segarra y otros chavos de la época…
– ¿Quién era el titular de ese resumen nocturno de los Juegos Olímpicos de Los Ángeles?
-Guillermo Ochoa y nosotros hacíamos los guiones, entonces, Félix Sordo, un muy querido amigo quien falleció en el terremoto del 85, a quien quise muchísimo y creo que él también a mí. Luego, en el 85, se venía la Liga Mexicana de Beisbol
– ¿Siempre te ha gustado narrar el beisbol?
-Sí, tan es así, que Toño Rocha, en el 85, me programa para que fuera el cronista de Los Tigres, así como de los Diablos Rojos de casa a través de la XEX, y en la XEQ, todos los partidos de gira.
– ¿Un periodista deportivo nace o se hace?
– ¡Uff!!, pues mira, te lo digo con toda la franqueza… ¡yo no me considero un periodista deportivo!!…
– ¿Pero un comunicador sí?
-Un comunicador si te lo acepto…
– ¿Un narrador?
– ¡También!! y hasta te acepto que me definas como un simple comentarista… ¿pero que me llames “periodista deportivo”? ¡No!!, la verdad es que no…
– ¿Por qué no?
-Porque debes reunir muchas características con las que, inclusive, debes nacer, y yo, no me considero un “periodista…”
-Si no eres periodista, entonces dime uno…
-Periodista… ¡Fernando Schwartz!!… un experto en cuestión de deportes al ciento por ciento
– ¿Qué tiene Schwartz que no tengas tú?
-Insisto, un pleno conocimiento de todos los deportes, al ciento por ciento…
– ¡Perdóname que te interrumpa!!, pero tú, no cantas mal las rancheras, eres muy culto y preparado en tu especialidad…
-Muchas gracias, pero honor a quien honor merece…
-A lo Mero Macho, no entiendo cuál es esa diferencia que marcas….
-Yo creo que la única diferencia que tenemos con respecto…
-Mi querido Enrique… ¿piensas que son gigantes en comparación a lo que tú realizas de manera tan brillante…?
– ¡Uff!, mi querido Edmundo, me pones en aprietos… Digamos que no, pero… vas a pensar que estoy divagando demasiado porque se me vienen a la mente infinidad de cosas, además, mira, me está haciendo señales el productor, ya tengo que entrar “al aire” en “Fórmula Deportiva” con Raúl Orvañanos…
-Te lo voy a decir claro y preciso, si algo caracteriza a Enrique Burak en sus narraciones, es saber acompañar con elegancia, un entretenimiento que disfruta el televidente en casa…
-Woow, muchas gracias.
-Te la pongo más fácil… ¿En qué consiste la labor de un cronista deportivo?
– ¡Qué bonita pregunta!! Nuestra labor consiste en acudir a los escenarios para narrar los partidos y hacer nuestro trabajo de la manera más ágil y atractiva…
– ¿Entonces, en dónde demonios esta esa diferencia de la que hablabas? Como espectador, te lo digo A lo Mero Macho, es una delicia y un agasajo escuchar tus narraciones…
-De pronto, su rostro enrojece levemente, con una leve sonrisa expresa: “Te lo agradezco mucho, la verdad es que, eso tiene que ver, primero…
-Insisto, ¿Por qué te manejas en un bajo perfil si tu trabajo es impecable?
-Yo creo que todos los que nos dedicamos a esto… ¡Uff!!, creo que debemos hacer una división…
– ¿…Entre quienes?
-Entre los que tenemos una verdadera pasión por el trabajo que realizamos al narrar eventos deportivos.
– ¿Hasta cuándo te imaginas seguir haciendo lo que realizas de manera formidable?
-Hasta que me sigan prestando la silla para seguir narrando…
– ¿Hay quienes nada más les gusta aparecer en la tele, pero de deportes no saben ni madres?
– ¡Uff!!, que pregunta tan fuerte!! Tienes muchísima razón, hay quienes nada más les gusta aparecer en la tele o en los medios…
-Esos, tienen nombres y apellidos…
-Enrique Burak no es un hombre de conflictos, pero respondiendo a tu pregunta, durante los últimos 40 años, me ha tocado ver un desfile, tanto en la tele como en los medios de comunicación como no tienes idea.
– ¿Se avientan como “El Borras”?
-Es que, cuando ven los esfuerzos y sacrificios que se tienen que realizar por esta carrera de cronista deportivo, es decir, no tienes tiempo libre, dejamos a un lado infinidad de eventos y compromisos familiares. Una noche, tenemos que permanecer en el Parque del Seguro Social sin saber hasta qué hora, porque se suspendió el partido de beisbol por lluvia y esos “periodistas deportivos” se aburren…
-En esta vida nada, pero nada es fácil…
– ¡Exacto!!, permanecemos solamente quienes nos apasiona esto, con las sabias enseñanzas de haber tenido el honor de trabajar con Fernando Schwartz, que lo primerito que te decía: ¿Tienes tu book history? Vamos, ni siquiera era un saludo de buenos días, sino que exigía que te preparas… ¡Obviamente!!, tenías que prepararte muy bien para hacer un digno papel frente al micrófono, las cámaras y narrar correctamente los partidos.
– ¿Qué sientes con esa gente falta de ética profesional?
-Te repito, me ha tocado ver, a lo largo de los años, gente que llega preguntando literal… ¿Quién juega? Y todavía se atreven sentarse para narrar. Me preguntas ¿Cómo me siento con esas personas? No es que me sienta incómodo con ellos, sino que no me siento bien conmigo mismo.
– ¿Por qué contigo?
-Porque te ves obligado a un enorme respeto con la gente que te ve y escucha en su casa, pero también, debes tenerte respeto a ti mismo, porque, con las “tablas” que tiene uno, la verdad, llegas y sacas el partido de manera adecuada y sin ningún problema.
-Sin que te molestes conmigo y con el respeto que mereces, tú, no eres ningún mediocre…
-No te preocupes, te lo agradezco, de ser así, le estaría fallando a la gente como a mí mismo… -Continuará-
