Las recientes sanciones contra varios medios rusos demuestran que Estados Unidos está librando una guerra contra la libertad de expresión, manifestó la portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, María Zajárova.
«Estados Unidos, al pisotear sus compromisos internacionales en materia de pluralismo de opiniones y hasta las cláusulas de su propia Constitución, ha declarado de hecho una guerra a la libertad de expresión en todo el mundo y recurre a las amenazas abiertas y el chantaje contra otras naciones en un intento de azuzarles contra los medios de comunicación rusos y establecer un control exclusivo sobre el espacio informativo global», declaró Zajárova.
La portavoz denunció «una caza de brujas, con la cultivación deliberada de una atmósfera de miedo generalizado y manía de espionaje que permite a los círculos gobernantes de EEUU manipular la opinión pública y proteger a la población de cualquier información que estimen inconveniente».
Zajárova reprochó a los organismos internacionales su mutismo ante las arbitrariedades que se cometen contra los medios de comunicación rusos y lo calificó como «consentimiento» y «complicidad».
«Las acciones de la Administración estadounidense no quedarán sin respuesta», advirtió.
El 13 de septiembre, el secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, anunció sanciones contra los grupos mediáticos Rossiya Segodnya (Sputnik, RIA Novosti), TV-Novosti (RT, Ruptly) y Evrazia, así como contra sus ejecutivos, por su presunta implicación en «campañas de desinformación» organizadas por el Kremlin.
Esta ronda de sanciones sigue a otra, del 4 de noviembre, contra Rossiya Segodnya, RIA Nóvosti, RT, Sputnik y Ruptly, por presuntas «operaciones de información encubierta». Sputnik