El Ministerio de Exteriores de Rusia calificó de «explosiva» la situación actual en Oriente Medio que amenaza con derivar en una gran guerra.
«El Oriente Medio llegó a un límite peligroso en el que se podría desatar una escalada descontrolada de la tensión, e incluso una gran guerra», dijo la portavoz de la institución, María Zajárova, a Sputnik.
La funcionaria apuntó que el origen de la crisis en Oriente Medio está relacionado «a la falta de una solución al conflicto palestino-israelí y la incapacidad de la comunidad internacional para parar el baño de sangre sin precedentes en la Franja de Gaza».
El conflicto palestino-israelí, subrayó, llevó al deterioro grave de la situación en toda la zona, ante todo en la frontera entre Israel y el Líbano, las áreas de los Altos del Golán ocupadas por Israel, el mar Rojo y el estrecho de Bab el Mandeb, la vía estratégica que conecta al golfo de Adén con el mar Rojo y puerta de entrada al canal de Suez.
Zajárova remarcó también que la confrontación entre Israel e Irán entró en una nueva fase.
La grave situación en Oriente Medio, subrayó la diplomática, es resultado del propósito de Estados Unidos de mantener en esta región su influencia dominante.
«El deseo de Washington de monopolizar el rol de mediador en el conflicto palestino-israelí, mantener el statu quo y promover una paz económica, dejando a un lado los asuntos fundamentales de la solución de este problema de larga data basada en las resoluciones de la Asamblea General y el Consejo de Seguridad de la ONU, contribuyó a la escalada», advirtió.
Paralelamente, dijo, los estadounidenses promovían su enfoque confrontacionista encaminado a crear líneas divisorias artificiales en la región y formar una coalición antiiraní.
Zajárova comentó además los informes de los medios de que Estados Unidos había desplegado sus tropas en Oriente Medio.
«El aumento de la presencia militar estadounidense en Oriente Medio, en particular en el Mediterráneo oriental, el mar Rojo, el Golfo Pérsico, amenaza con una mayor escalada», enfatizó.
Basta con recordar, señaló, que la supuesta operación pacificadora que Washington empezó a principios de año, derivó en ataques armados de Estados Unidos y el Reino Unido al territorio de Yemen y llevó solo a un mayor deterioro de la situación en esta parte del mundo.
Rusia, por su parte, declaró la diplomática, llama a las partes involucradas a desistir de actos que degraden la situación en Oriente Medio.
«Instamos a todos los actores implicados a mostrar un enfoque responsable para evitar el aumento de la espiral de violencia que amenaza con consecuencias nefastas para la seguridad regional y global», apostilló.