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Luego de una consulta “exprés” donde el pueblo agradecido dijo sí, la voz del profeta se alzó y dijo que la reforma judicial va en los términos que la planteó a sus garbanceros, sin cambios ni en puntos o comas, mandato que acogió la corcholata presidencial a pie juntillas y anunció que con su mayoría en el Congreso donde habrán de “comprar” dos votos del Senado, la aprobará.

Y se hará pase lo que pase, incluso una crisis financiera que le caerá anillo al dedo al proyecto cuatrotero donde los de “arriba” perderán sus privilegios y los de abajo estarán felices mientras dure la lana para regalarles dinero a través de los programas sociales que sin importar que caiga la administración en mayor déficit y deuda, habrá de ampliarse.

Todo listo para lo que venga y más vale que sea pronto para que dé espacio a la consolidación de una 4T donde la muerte ligada al crimen organizado, la pobreza marcada por un mayor endeudamiento que llega a siete billones de pesos en la presente administración y obras de dudosa viabilidad financiera o social, son la marca de la casa, amén de una inflación controlada a través de subsidios y dinero gratis con que se da pan y cinco a los agradecidos pobladores.

No importa que el Banco Mundial diga que aprecia una desaceleración económica al menos en los dos primeros años de la administración que está por venir y que será administrada atrás del trono por el mismo mesías tropical, quien ya lo dijo, s la encarnación del proyecto cuatroteísta.

Al igual que Citibanamex y la encuesta de Banxico con analistas, el BM afirma que sin hacer cambios, la próxima administración verá una desaceleración económica derivada de la restricción de políticas fiscal y monetaria, es decir que a pesar de lo que diga el caudillo, la recaudación no evitará el déficit público con todo y la reducción del gasto, mientras por su lado, las expectativas inflacionarias se mantendrán por arriba del 4,7 en la general y de dos décimas más en la subyacente lo cual se traduce en carestía al menos en dos años más que podría incrementarse.

A ello se suman tasas de dos dígitos del propio banco central, no menos del 10 por ciento y aunque es una medida antiinflacionaria, el hecho es que, con la puesta en circulación de los casi 800 mil millones de dinero gratis de los programas sociales con sus ampliaciones, se empujará al sostenimiento de la inflación pues la demanda que por un lado intenta frenar el Banxico, por el otro lado el gobierno la favorece al colocar recursos sin sustento de alguna actividad productiva.

O sea, un gran contrasentido que además se estimula con la simulación de mantener precios de carburantes mediante un subsidio que se debe restar de no ingresos presupuestales con lo que el fisco ya suma más de 600 mil millones de merma a través del cobro parcial de IEPS.

Lo que es peor, el esperado 2.1 por ciento que se pronosticaba de crecimiento para este año, descendió dos décimas después de que al principio de año se habló de un 2.6 por ciento.

El otro tema que gravitará es el de la deuda y aunque se estén haciendo pagos adelantados de bonos con vencimiento en 2025 por cerca de cuatro mil millones de dólares, no se olvide que es con dinero prestado que como en este año, se colocó por arriba del 11 por ciento, es decir, más deuda cara debajo de la alfombra, aunque los intereses deberán pagarse al vencimiento de los nuevos documentos.

Por eso pareciera que la 4T está ganando tiempo para esperar lo que viene, incluso en caso de un ajuste mayor del peso ya no incidirá en la deuda a corto plazo.

Esa es una señal más de que las reformas del caudillo de Tepetitán van como están y a ver con qué topan incluso una posible cancelación de inversiones directas lo cual se mitigará con la emisión de bonos a muy buen interés que los haga atractivos y evite la fuga de capitales. Por fortuna las reservas internacionales andan por arriba de los 210 mil millones de dólares y garantizan la solvencia de México como país, pero hasta cierto límite.

Sin duda van a estirar la liga porque la consolidación del régimen actual implica acabar con las resistencias, someter a los organismos electorales, a los autónomos o de plano minimizarlos y transformarlos en entes dependientes del gobierno federal.

En la reforma judicial será lo mismo que en los cargos de elección popular donde morena y satélites con su mayoría, obtengan el voto a favor de sus candidatos, donde desde luego las organizaciones criminales tendrán voz y voto.

De eso se trata, para ello cuentan con el pueblo agradecido, los abrazos y desde luego para eso fue la fabulosa consulto realizada en días pasados y revelada ¡oh sorpresa! Por la corcholata presidencial porque el pueblo bueno y sabio así lo pidió, igualito que la de la chachalaca tabasqueña con la cancelación del NAIM.