Punto de Vista
Por Jesús Michel Narváez
Las prohibiciones legales, se las pasa por el arco del triunfo.
Inventa nuevos pretextos para mantener su injerencia en el proceso electoral.
Su declaración: habrá continuidad con cambio, es la promoción más abierta en favor de su alumna favorita.
Cada que puede, utiliza los subterfugios para estar en los estados en donde hay elecciones y mostrar un. catálogo de logros. No debe hablar de las obras, de las acciones de gobierno exceptuando las de salud, educación y protección civil. De los otras, silencio obligatorio. Bueno, eso señala la ley electoral y las reglas que fijó el “independiente” INE.
Sin embargo, a puerta cerrada, con información oficial a modo, se promovió una reunión de los gobernadores de Morena con el huésped temporal de Palacio Nacional para, según se dijo, revisar los avances del IMSS-Bienestar.
¡Pamplinas!
El objetivo de la cumbre morena es uno solo: arreciar el cinturón del proceso electoral y que cada mandatario utilice las herramientas legales con las que cuente y, por supuesto, las ilegales si se hacen necesarias. En la reunión estuvieron también los “servidores de AMLO, perdón de la Nación”.
El inquilino del virreinal inmueble dice tener todo seguro y que ganará su candidata. Sin embargo, en los hechos, se le mira irritado, nervioso y berrinchudo. Trata a toda costa de influir “ánimo” en sus “seguidores” y hacerlos sentir que el arroz ya llevó a la cocción adecuada cuando apenas comenzó a hervir para llegar al punto.
Cuando el tiempo se acaba, no hay forma de alargarlo. Salvo, claro está, que se detengan las manecillas del reloj para frenar el avance. Lo sabe el huésped temporal de Palacio Nacional y siente que la lumbre le llega a los aparejos, aunque busque disimular. Por ello arremete contra los académicos, intelectuales, mentes brillantes que superan el IQ -si lo tiene- y que decidieron apoyar a la candidata de la oposición. Los llamó alcahuetes y vendidos.
Seguramente no ha leído la definición de alcahuete. Aquí está: Se llama alcahuete o alcahueta a quien facilita los encuentros amorosos y a quien trabaja para otra persona con el fin de conseguir esas relaciones. Por tanto, la acción de alcahuetear es la de hacer de mediador o encubridor de relaciones sexuales ilícitas.
Si alguno de los intelectuales o académicos es alcahuete, entonces es un traficante de personas que vende sus servicios al mejor postor. ¿Sabe si alguno o alguna de ellas practica esa actividad? Porque estaría violando la ley y de saberlo, es su obligación denunciar ante el autónomo Fiscal General de la República.
El que sí viola ley con la impunidad que el poder le concede, es el señor López con reuniones disfrazadas de trabajo y que son únicamente para afinar la apisonadora y tratar de enterrar a las oposiciones.
Sabe que no tiene ganado nada y la preocupación mayor se la proporcionó la Marea Rosa.
Se indigestó y ni con sal de uvas ha podido mejorar el trabajo del intestino.
Por supuesto, se le inflamó el hígado y el sueño se alejó.
¿Por qué tiene que llamar a Palacio Nacional a todos los gobernadores de Morena y deja fuera a los de las oposiciones?
El programa IMSS-Bienestar no debe estar condicionado a entregar los servicios de salud estatales al organismo que quiere ser el ejecutor del “mejor sistema de salud del mundo” (eso dice Claudia Sheinbaum).
El riesgo de la compra o cooptación del voto no lo ejercerán las oposiciones. No tienen el dinero y tampoco la infraestructura que, en cambio, posee Morena y el gobierno federal con sus satélites en 23 entidades.
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