A la Vuelta de la Esquina
IVÁN RUIZ FLORES
Tras advertencia no hay engaño. Lo dicen los expertos y todos debemos reflexionar en lo que está sucediendo en nuestro país, así y las consecuencias para las mayorías que traen consigo las malas prácticas y los abusos.
Desde la UNAM (en su Gaceta Universitaria) se realizó un exhorto a la prudencia en estos tiempos en los cuales los incendios sobre todo en los bosques están a la orden del día.
Fue Lilia de Lourdes Manzo Delgado, investigadora del Laboratorio de Análisis Geoespacial del Instituto de Geografía de la UNAM Quien precisó:
“Con todo, si las condiciones meteorológicas imperantes hasta el momento (sequía extrema, precipitación escasa, así como temperaturas altas) persisten resulta probable que el número de incendios supere este año el que se registró en 2023”.
Ella expuso conforme a datos de la Comisión Nacional Forestal (Conafor) que en 2022 hubo, en promedio, 20 incendios por día, mientras que también en 2023 (casi 21 diarios), pero 2024 llegó a romper aquella efímera regla, porque a 123 días del año ya se habían presentado hasta el 2 de mayo, 28 casos diarios (28.59 en promedio por día, 3,517 en total), ocho más que el año previo.
Explica: “Si se compara el mismo periodo del 2023 con el de este año (enero-primeros días de mayo) el panorama era peor el año pasado, con 38 incendios diariamente (4,774, en total)”.
Pero dice en relación con las hectáreas siniestradas que en 2023 el promedio diario fue de 2,864 (352,297 en total), mientras que en 2024 ha sido de las 1,462 mencionadas.
La especialista hizo notar que en este año uno de los incendios más fuertes ha sido el de la región de Los Chimalapas, en Oaxaca, donde, según las autoridades, después de 33 días (del 24 de marzo al 26 de abril), el fuego destruyó aproximadamente 34,000 hectáreas.
“Habría que estar atentos a lo que pasa durante el resto de mayo, porque la temporada de incendios va de febrero a junio, principalmente en las regiones centro y sur sureste, pero los meses con el mayor número de ellos y hectáreas afectadas son abril y mayo. Insisto: si la precipitación escasa, la sequía extrema y las temperaturas altas persisten, podrían seguir presentándose incendios en regiones importantes del país”, precisó la especialista.
Efectivamente, todavía nos faltan 10 días para que concluya el caluroso mes de mayo.
Ella, en esta su especialidad, precisó lo que sucedió en décadas críticas de incendios de pasadas temporadas (2010- 2019; 2011- 2019), pero puntualizó que ya en la actual en 2020 no fue tan importante, aunque en 2021, 2022 y 2023 creció con respecto al año anterior.
Advirtió: si las condiciones meteorológicas actuales no varían, la superficie de afectación podría ser igual a –o un poco mayor que– la de 2023, o sea, la tendencia al alza continuaría.
Hay que estar pendientes pues, aunque ellos, los especialistas ya lo sabían. Explica:
“Con respecto a 2024, ya se preveía que marzo iba a ser un mes con un riesgo de incendios muy grande, lo cual se confirmó porque durante ese mes se presentaron varios, incluso en algunas regiones donde no es tan común que los haya, por ejemplo, Veracruz, las cercanías de Acapulco y algunos lugares de Puebla e Hidalgo”.
El asunto de los incendios no se queda ahí. No, porque la especialista explicó lo dicho por las autoridades forestales: entre el 27 % y el 3 % de los incendios en México son intencionales, 25 % están asociados a quemas agropecuarias que se salen de control y el resto se desata debido a la precipitación escasa, a la sequía extrema y a las temperaturas altas.
“En lo que va de este año, se han registrado en el Estado de México, Oaxaca, Chiapas, Jalisco, Nayarit, Zacatecas y Yucatán, y, de manera excepcional, en Veracruz, Puebla e Hidalgo”, dijo.
Respecto de las precauciones de parte de las autoridades expresó que deben planear bien la distribución de sus recursos económicos y contribuir a que las brigadas contra incendios lleguen con rapidez a los lugares donde sean requeridas.
Y recalcó:
“De hecho, sé que están cumpliendo con su tarea. La Conafor, la Comisión Nacional de Áreas Protegidas y otras dependencias gubernamentales brindan un apoyo invaluable en la lucha contra los incendios.
Perooo
“No obstante, es necesario que tanto las personas que se dedican a preparar sus tierras de cultivos con quemas agropecuarias como los paseantes hagan un uso más consciente del fuego bajo estas condiciones extremas que vivimos hoy en día”, concluyó la especialista.
Desde luego es difícil recuperar las partes incendiadas. Ella lo explicó al expresar…
“¿Cuánto tiempo tarda un bosque quemado en regenerarse? Depende de las especies afectadas, del grado de daño que hayan sufrido y del cuidado y de la conservación que se le preste, pero se puede afirmar que en promedio de 15 a 20 años.
“Hace poco, mis colegas y yo visitamos la Selva El Ocote, en Chiapas, que fue arrasada por un incendio muy severo en 1998 y, al recorrerla, los pobladores nos dijeron que, después de más de 20 años algunas partes del bosque comienzan a verse como antes de 1998. Claro, los bosques templados resisten el fuego un poco más, porque dependen de él para la germinación de muchas semillas,” concluyó.
Sí, todos debemos estar atentos y evitar riesgos…