En medio de escasas propuestas, la candidata presidencial de la coalición Fuerza y Corazón por México (PAN, PRI y PRD), Xóchitl Gálvez, volvió a retomar las cartulinas para intentar desacreditar a la abanderada de Sigamos Haciendo Historia (Morena, PT y PVEM), Claudia Sheinbaum, a quien se refirió de nueva cuenta como la candidata de las mentiras.
Ante ello, la morenista marcó distancia: las mexicanas y los mexicanos no nos merecemos un debate presidencial lleno de calumnias y mentiras, eso refleja la ausencia de proyecto.
Al subrayar que no voy a caer en este caso en provocaciones, expresó: “al debate venimos a presentar propuestas, a defender nuestro proyecto y por supuesto a defender nuestra calidad humana. Entiendo la desesperación del PRIAN, va en un lejano segundo lugar, pero no comparto sus métodos.
Al debate venimos también a contrastar ideas, que no se espante, atajó la hidalguense, quien, al sumarse al tema de salud que fue parte de la discusión, aseveró que 300 mil personas fallecieron en la pandemia por el mal manejo de las autoridades. Reconócelo, en lugar de pedir el voto deberías de pedir perdón, espetó a la morenista.
El último de los debates presidenciales arrancó en su primer bloque con el tema de política social como eje. Fue la morenista la que acentuó lo hecho con las políticas en materia de vivienda, de salud y de programas sociales, de los que recalcó que, por convicción y no por conveniencia, sólo el movimiento que representa puede mantener en beneficio de los mexicanos.
Por su parte, el candidato de Movimiento Ciudadano, Jorge Álvarez Máynez, quien también repartió críticas para ambas, dijo a la abanderada del PAN, PRI y PRD que si los programas sociales están en la Constitución no es por la voluntad de los partidos que la apoyan porque el PAN fue el único partido que votó en contra. Gálvez respondió que a mí ningún hombre me manda, los programas sociales se quedan. El emecista replicó: me han cuestionado por lo que hace el gobernador de Nuevo León, a la candidata de Morena la ha cuestionado por lo que hace el Presidente, y cuando se saca el tema de los ex presidentes del PRI y del PAN que fueron los más corruptos de la historia de México, dice que a ella no le mandan.
Desde el Centro Cultural Universitario Tlatelolco, sede del encuentro, Sheinbaum inició su participación con una alusión a los hechos de 1968. “Nos encontramos en Tlatelolco, donde ocurrió uno de los episodios más dolorosos de la historia de México, la represión del 2 de octubre, cuando un presidente priísta ordenó la represión y el asesinato de jóvenes que luchaban por la libertad. 56 años después nos encontramos aquí con el mismo PRIAN”.
Entre las contadas propuestas que se presentaron, Sheinbaum planteó crear un millón de viviendas para jóvenes por medio de una reforma al Infonavit; Gálvez ofreció una pensión desde los 60 años y afirmó que terminaría con la pobreza extrema, mientras Álvarez Máynez se inclinó por brindar un salario mínimo de 10 mil pesos y una jornada laboral con dos días de descanso semanales.