La declaración exigió la finalización de la agresión y un alto al fuego inmediato y de forma permanente, y la detención del desplazamiento forzado del pueblo palestino.
La declaración final de la 33ª Cumbre Árabe celebrada en Manama, capital de Bahréin, condenó los crímenes y las violaciones del derecho internacional, de las fuerzas de ocupación de Israel en la Franja de Gaza desde el 7 de octubre de 2023.
Asimismo, la declaración exige el fin de la agresión y un alto al fuego inmediato y de forma permanente, así como la detención del desplazamiento forzado del pueblo palestino y la posibilidad de la entrada de asistencia humanitaria a Gaza.
En el texto se emitió un rechazo a la agresión israelí a la ciudad de Rafah que acoge a más de un millón de personas desplazadas forzadamente, lo cual crearía el peligro de una catástrofe con consecuencias humanitarias.
De igual manera, se condenó el dominio que ejercen las fuerzas de ocupación de Israel del lado palestino del cruce de Rafah, con la intención de endurecer el aislamiento a la Franja de Gaza e interrumpir el paso de ayuda humanitaria.
Asimismo, requirió la declaración que finalice la agresión de las fuerzas del Ejército de Israel y su retirada de toda la Franja, que se quite el aislamiento impuesto y la supresión de todos los impedimentos, además de que se abran todos los cruces ante la asistencia humanitaria.
Las naciones árabes instaron a rechazar cualquier tentativa de desplazar por la fuerza al pueblo palestino de sus tierras en la Franja de Gaza y Cisjordania, contenida Jerusalén, y se solicitó que se asuman acciones para la protección a los civiles, la finalización de la agresión y el alto al fuego.
(Agencias)
