¿Cuándo terminará la segunda ola de calor?

Las altas temperaturas continuarán afectando a gran parte de la Ciudad de México debido a la segunda onda de calor, la cual se prevé se mantenga durante varios días.

El fenómeno podría provocar temperaturas muy calurosas, de entre 30 a 34 grados Celsius a partir del viernes 3 de mayo en la mayor parte del territorio capitalino.

Fue por medio su cuenta de X (@SGIRPC_CDMX) que la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil indicó que se prevé que estas condiciones continúen hasta al menos el sábado 11 de mayo.

“La SGIRPC emitió un aviso especial por una onda de calor que provocará temperaturas altas en la mayor parte del territorio capitalino, al menos hasta el sábado 11 de mayo”, se lee en el comunicado.

Agregó que durante estos días se pronostica cielo despejado, baja probabilidad de lluvia, elevado índice de radiación ultraviota, alta concentración de contaminantes y algunas rachas de viento con tolvaneras.

Mientras que la Comisión Nacional del Agua (Conagua) señaló que a partir de hoy y hasta el próximo martes 7 de mayo se pronostican temperaturas máximas de 33 grados Celsius y mínimas de 16 a 18 grados en Ciudad de México.

Tras lo anterior la dependencia capitalina recomendó a la población aplicar medidas preventivas para evitar afectaciones a la salud, así como prevenir incendios en áreas verdes dentro de la zona urbana.

– No exponerse por tiempo prolongado al sol, permanecer en lugares frescos y ventilados

– Usar bloqueador solar.

– Beber abundantes líquidos.

– Vestir con ropa ligera de colores claros, utilizar gafas para sol, sombrilla, sombrero o gorra.

– Evitar comer en la vía pública, debido a que los alimentos se descomponen rápidamente.

– Prestar atención a las personas del entorno, especialmente a los bebés, infantes y adultos mayores.

– Reciclar el agua que se utiliza para limpieza del hogar y con ella humedecer camellones y áreas de pasto cercanas.

– Evitar arrojar colillas de cigarro encendidas y basura, especialmente plástico o vidrio, ya que los rayos solares pueden generar un efecto lupa e iniciar un incendio.

Otras recomendaciones generales son:

– Evitar las horas más calurosas: Limitar la exposición al sol y las actividades físicas extenuantes durante las horas centrales del día, generalmente de 11:00 a 16:00 horas, cuando el sol es más intenso.

– Enfriamiento activo: Usar ventiladores o aire acondicionado para ayudar a mantener frescos los espacios cerrados. En ausencia de estos, las duchas frías o paños húmedos en la nuca pueden ofrecer alivio inmediato.

– Nutrición: Optar por comidas ligeras y frescas, ricas en frutas y verduras, evitando platos muy condimentados o pesados que aumenten la sensación de calor.

Una onda de calor es un período prolongado de temperaturas excepcionalmente altas y, en ocasiones, de humedad elevada, que supera los valores máximos habituales para una región específica durante esa época del año.

Esta se forma debido a sistemas de alta presión atmosférica que se instalan y estabilizan en una zona. Bajo estas condiciones, el aire del suelo se calienta y se dificulta la dispersión de calor, lo que incrementa las temperaturas.

Este fenómeno es más común durante los meses de verano, aunque su frecuencia e intensidad pueden variar según la región geográfica.

Las consecuencias de una onda de calor pueden ser graves, incluyendo efectos negativos en la salud humana como el agotamiento por calor y el golpe de calor, un aumento en la mortalidad, y la exacerbación de condiciones médicas preexistentes. Además, impacta en la agricultura, el suministro de agua, y puede contribuir a incendios forestales.

(Agencias)