Punto de Vista
Por Jesús Michel Narváez
Mientras se hizo acompañar del dirigente, que no líder, de Morena, y en conferencia de prensa sacaba la “casta” para intentar denigrar a la ministra Norma Lucía Piña Hernández, y hace pública la decisión de “llevarla a juicio político” y, como dicen los narradores de cuentos de hadas, a la mañana siguiente el jefe de la banda… presidencial decía no estar de acuerdo con la medida, los senadores del bloque de contención -del PAN y el PR, PRE y MC se quedaron solamente milando- presentaron la petición de juicio político en contra de Arturo Zaldívar Lelo de Larrea.
Entregaron la documentación e n la Secretaría General de la Cámara de Diputados y se iniciaron los trámites.
Tampoco prosperará, porque la Subcomisión de Examen cuenta con tres aliados de Zaldívar y solo un “adversario”.
Es parte de la distracción y como las peticiones de juicio político se llevan de manera cronológica y hay poco más de cien pendientes, la espera será larga… quizá en septiembre se agilice. Sí, cuando el Congreso de la Unión le sea arrebato a Morena y adláteres.
Mientras tanto, se debe entender que si el amo del exministro no está de acuerdo con algo, tiene que obedecer, mostrar docilidad, obediencia ciega y respeto a la corona.
La petición de juicio de los senadores de oposición, está detallada. Cuenta cómo el mismo día en que presentó su carta de renuncia al huésped temporal de Palacio Nacional y antes de que el Senado aprobara su retiro, violando la Constitución porque no había, no hubo, causa grave para abandonar el cargo y ahora sí hay carnita para deshebrar, ya estaba reunido con Claudia Sheinbaum quien aún era coordinadora nacional de los comités de defensa de la cuatroté y ella anunciaba que se integraba al equipo que seguirá haciendo historia.
Además de señalar presuntos actos que se dieron abusando de poder para influir en la decisión de los jueces. Una acción de prevaricación. Y de acuerdo con el escrito de los senadores, Zaldívar “sugería” los temas que al presidente mexicano le interesaban.
Y aunque el expresidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación salió a defender su honorabilidad y rectitud como juzgador, en el imaginario colectivo del sector justicia, nadie le creyó una palabra y menos cuando recibió elogios desmedidos, por cierto, de parte del inquilino del virreinal inmueble.
Entre el grupo de senadores que firmaron la petición se encuentran las panistas Lilly Téllez, Gina Cruz, Kenia López, Guadalupe Saldaña y Alejandra Reynoso, mientras que del PRI firmaron Claudia Anaya, Manuel Añorve y Mario Zamora.
¿Procederá la solicitud?
Es difícil asegurar el sí o el no. Pero la figura de quien en su momento fue calificado como un gran ministro, como un abogado de primera y como un maestro que en sus clases defendía la Constitución y la legalidad por encima de cualquier sugerencia política, ha sido abollada.
Con los señalamientos que se le han hecho a causa de la desnudada que le propinó su amigo, el señor López en una de sus mañaneras, requerirá no de un hojalatero para reparar los daños de la carrocería humana, sino un cirujano plástico que le quite la cara de amargura que presenta desde hace dos semanas.
Aunque, habrá de reconocerse, que también el plástico estaría obligado a borrarle la sonrisa de soberbia que parece ser un tic nervioso.
Sea como fuere, avance o no el juicio, los congresistas le comieron el mandado.
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