SE COMENTA SOLO CON
CARLOS RAMOS PADILLA
Al paso de la todavía corta y temprana campañas electoral, es evidente la presencia de dos polos totalmente opuestos. Sheinbaum con su actitud de servilismo político al tabasqueño y ofreciendo más de los mismo y Xóchitl con proyectos varios y la necesidad de reconstrucción y mejoramiento.
Xóchitl Gálvez se ha convertido en un referente mundial, no así Claudia. Xóchitl ha ganado simpatía, reconocimiento y confianza, Claudia dudas y nada de empatía. A Xóchitl se le ve contenta, a Claudia estresada. Xóchitl llena plazas públicas, Claudia ni estadios ni es reconocida en salas de espera de aeropuertos sentada junto a Epigmenio Ibarra.
Xóchitl tiene elementos le faltan argumentos. Claudia desarrolla arengas cansadas y repetitivas. Xóchitl insiste en su bicicleta, Claudia ha cambiado su imagen y se ve más segura. Xóchitl sí quiere ser estadista que se suba ya ese pedestal. Claudia debe muchas cuentas durante su gestión pública. Xóchitl está muy pero muy alejada del crimen organizado, a Claudia y a su equipo cada día se le vincula más con los malosos. Xóchitl ha crecido, Claudia se ha estancado. Xóchitl va con energía, Claudia tiene el soporte del aparato del Estado.
A Xóchitl en cada tema se le presenta el terreno fértil para desnudar las falsedades y mentiras de sus opositores, Claudia intenta defender lo indefendible. Xóchitl fue emprendedora empresarial, Claudia parista callejera estudiantil. Xóchitl defiende las instituciones, Claudia ataca a la UNAM y es la represéntate de un gobierno mentiroso, abusivo, corrupto, responsable de miles de muertes, omiso, negligente y rodeado de corruptos (así y en diferentes etapas los ha acusado amlo -la mafia en el poder- que ahora los tiene bajo su protección). Xóchitl dice que irá en defensa del Estado de Derecho y el fortalecimiento de la diplomacia, Claudia protegerá a personajes arbitrarios, tiranos y represores en América Latina.
Xóchitl en su biografía de vida no presenta la sombra de algún cadáver, Claudia está eternamente ligada a los fallecidos en la Línea 12 y Colegio Rébsamen. Xóchitl habla con majaderías, Claudia se rodea de majaderos. Xóchitl se muestra decidida, Claudia insatisfecha, despectiva, soberbia. Xóchitl impulsa el diálogo, Claudia confunde debates con informes de gobierno y aun así la regañan.
Xóchitl señala errores, Claudia habla de una convivencia urbana que no conocemos. Xóchitl sabe que no las trae todas consigo, Claudia igual. Xóchitl es congruente, Claudia se atropella en sus contradicciones, una mujer que presume sus grados académicos y profesionales como ambientalista y deja a la CDMX con la peor crisis de agua y contingencias en la historia. Xóchitl desea volver la dignidad a las Fuerzas Armadas, Claudia los ha calificado de represores y Epigmenio les ha dicho a los soldados “asesinos”. Así podemos constatar a dos polos antagónicos cada día más visibles. Y de lo aquí escrito hay testimonios y curiosamente son ellas, las dos, las que alimentan estos párrafos.
