* La Falsedad Como Política de Gobierno Debe Erradicarse
*El Derecho a la Verdad, Valor que se Debe Proteger, Garantizar, Preservar y Promover
*En México se Llega a Interpretar la Mentira Como Sinónimo de Inteligencia
*Significa Rehuir la Realidad, Escapar por una Puerta Falsa y Engañar Para Eludir la Responsabilidad
*El Contagio se ha Convertido en Epidemia con Subordinados Incluida Claudia Sheinbaum
*Y Ahora Resulta que También Tiene Otros Datos la Dama de Hielo, Fría, Insensible y sin Corazón
*Así la Calificó Xóchitl Gálvez al dar en el Blanco Durante el Pasado Debate
*Ella Guardó Silencio, Sobre las Lamentables Tragedias del Rébsamen y la Línea 12
*Tampoco Tuvo un Gesto de Amabilidad con las Mamás de los Niños con Cáncer
*No Explicó Haber Proporcionado a la Población Medicamento Contra Piojos en la Pandemia
*Y Estamos Hartos de vivir en un País Donde la Constitución y las Leyes no Cuentan
ALEJANDRO ZAPATA PEROGORDO
Se ha vuelto una mala costumbre sobre todo en el ámbito oficial faltar a la verdad, una gran parte de la información se oculta, es tergiversada o de plano cambiada por versiones que no se apegan a la realidad, son narrativas falsas y, lo peor, es que se ha vuelto una práctica común.
En algunos países se castiga severamente a quien declara falsamente, son aspectos donde se privilegia un bien jurídico, político, cultural y social: el derecho a conocer la verdad. Se considera un valor que se debe proteger, garantizar, preservar y promover, debido a ello, es objeto de una tutela.
Por desgracia en México es completamente diferente, inclusive en no pocas ocasiones se llega a interpretar la mentira como sinónimo de inteligencia, cuando en realidad significa rehuir a la realidad, escapar por una puerta falsa, engañar a otros para eludir la responsabilidad, en síntesis, se trata de un acto de cobardía.
No obstante, es una práctica común, extremadamente arraigada desde las más altas esferas del gobierno a tal grado que, durante las mañaneras de López Obrador, se le han contabilizado más de treinta mil mentiras o datos falsos, que en otras latitudes serian un gran escándalo, sin embargo, aquí no pasa nada.
Si desde la Presidencia de la República se ejerce el gobierno con una gran cantidad de mentiras, resulta obvio que el contagio se ha convertido en epidemia con sus subordinados y compañeros de partido incluyendo a Claudia Sheinbaum, quien con la mayor naturalidad en el pasado debate se condujo de la misma forma que su jefe político.
Ahora resulta que también tiene otros datos, la dama de hielo, mujer fría, insensible y sin corazón, como la califico Xóchitl Gálvez, mostró su verdadero rostro, evadió los cuestionamientos haciendo mutis y en otros se salió por la tangente sin responder, para culminar proporciona información completamente sesgada y manipulada.
Puntos torales como las lamentables tragedias del colegio Rébsamen y la Línea 12 del metro, fueron ignorados por Sheinbaum, quien no dio explicación alguna a pesar de que esos tristes episodios motivaron la perdida de vidas, con su silencio e inmutabilidad reveló una insensibilidad que nada tiene que ver con el humanismo que predican.
Ni siquiera tuvo un gesto de amabilidad con las mamás de los niños con cáncer que está administración los dejó sin medicinas para sus tratamientos, provocando que algunos de ellos fueran destinados a la muerte o a los familiares de los desaparecidos que también estaban presentes, a ambos los ignoró por completo.
Lo mismo ocurrió cuando se le planteó sobre el desmantelamiento del sistema de salud o haberles proporcionado medicamente para piojos (ivermectina) a la gente durante la pandemia.
En realidad, quiere ser alguien que no es y, por esa razón procura imitarlo, sin embargo, no se presenta como una figura propia con alma y corazón, además con datos que tampoco corresponden a la realidad, tratando de convencernos de que todo está bien, cuando sabemos que transitamos por una profunda crisis.
Estamos hartos de vivir en un país de mentiras y engaños, donde la constitución y las leyes no cuentan, esa es le continuidad que ofrecen, me resisto a seguir igual.