Las bombas rusas FAB cambian las reglas del juego en Ucrania, señaló a Sputnik el experto en seguridad y relaciones internacionales Mark Sleboda. Agregó que los medios occidentales también se ven obligados a reconocer su eficacia, que han atormentado a las defensas ucranianas en el frente.
«La prensa occidental está llamando a esta arma un cambio de juego. Y por una vez, podría estar de acuerdo con ellos. Esta arma ha cambiado las reglas del juego», señaló a Sputnik Mark Sleboda.
Esencialmente equivalentes a las bombas estadounidenses JDAM, las FAB son más precisas y potentes, explicó Sleboda.
«Las hay de varios tamaños, desde 250 kg (…) Y las nuevas, que pronto llegarán al campo de batalla, son de 3.000 kg», destacó, añadiendo que pueden «demoler» una fortificación de «un solo disparo y dejar un gran cráter humeante en el suelo».
Mientras tanto, en sus palabras, las pocas JDAM suministradas a Ucrania tenían poco efecto en el campo de batalla porque Kiev carece de una fuerza aérea que pueda penetrar las defensas aéreas rusas. Por el contrario, continuó, Rusia está utilizando las FAB con frecuencia, destacando que más de 500 de ellas fueron lanzadas sobre Avdéyevka en los últimos días del ataque a la ciudad.
«La única manera de contrarrestarlas es contar con una defensa aérea de largo alcance, de la que el régimen de Kiev carece», explicó Sleboda.