ALBERTO F. MENA MALLEN
Gota tras otra llena un cantarito, y así pasa con el tiempo de las mujeres. Han sido agraviadas en la historia por muchos, pero muchos años, pero con las frecuentes luchas que han encabezado ya dirigen gobiernos, empresas, negocios, familias, discusiones, debates, aunque en algunos casos no tengan razón, pero con un solo agravio, la unidad las hace fuertes.
Y se vio en la marcha del pasado 8 de marzo, cuando atiborraron el zócalo capitalino, donde se fortificó Palacio Nacional para evitar que pintaran sus muros o rompieran una puerta, pero la verdad, han sido olvidadas por quien ocupa la silla presidencial, sobre todo las madres buscadoras, a quienes no apoya en su lucha por encontrar a sus familiares desparecidos.
Incluso una de ellas, Ceci Flores, fundadora de las madres buscadoras de Sonora, en un intento para que el gobierno morenista se haga responsable de la búsqueda de más de 110 mil personas desparecidas en el país, -lo que el gobierno actual modificó a la baja en más de 99 mil-, hizo entrega a AMLO de la pala de mando que utiliza para buscar a tres de sus hijos desparecidos desde el 2015, a quienes aún no ha encontrado ya que, argumentó, está cansada de tantas amenazas que recibe por su labor y destacó que han asesinado a 20 madres buscadoras, 15 de ellas en este sexenio. Ella no quiere morir.
Otro ejemplo fue Rosario Robles, ex jefa de gobierno de la Ciudad de México quien estuvo presa por más de 3 años, con el argumento de haber participado en la “Estafa Maestra”, utilizando como prueba una credencial con un domicilio falso. Sin embargo, no ha hecho nada en contra Ignacio Ovalle, quien al frente de Segalmex estafó a la institución con más de 15 mil millones de pesos y a quien protegió enviándolo a la secretaría de Gobernación. Es un amigo que fue engañado, según el Peje.
También usa el argumento de la paridad de género en su gabinete, donde la mitad de los cargos los ocupan ellas, pero que la violencia contra las mujeres se ha acentuado en su gobierno. En los tres primeros años del actual sexenio, delitos como feminicidio, homicidio doloso, violación y violencia familiar han registrado números récord. No le importa que haya cerca de diez feminicidios al día, mismos que en su mayoría quedan en la impunidad.
El tiempo de las mujeres llegó. Ahora existen dos de ellas compitiendo como candidatas a la presidencia de la República, la corcholata de YSQ, Claudia Sheinbaum y la opositora apoyada por tres partidos, Xóchitl Gálvez, quienes desde que iniciaron su labor política por el territorio nacional, han destacado sus contrastes, por un supuesto buen gobierno que ha realizado el macuspano y que defiende la ex jefa de gobierno de la Ciudad de México y la pésima administración de López que critica la hidalguense.
Ambas tienen positivos y negativos, mismos que se sopesan desde el punto de vista de cada quien. La morenista aseguró que continuará la labor del tabasqueño en su cuarta transformación y la exsenadora destaca que hay acciones buenas, que mejorará y malas que desechará de su gobierno, en caso de que triunfe.
Pero mientras, la doctora realiza su campaña atrás del rey de palacio, porque la apoya con recursos del erario nacional, aparte de que hay órdenes de que los gobernadores, legisladores del clan Morena, así como servidores de la nación, pagados por el gobierno federal, ayuden a que su representante tenga que ganar a costa de lo que sea, aunque repitan que son demócratas y respetuosos de las leyes, lo que es mentira, porque violan normas y leyes en cada paso que dan, sin importarles las criticas y denuncias que se han hecho al respecto.
En la historia mexicana han destacado muchas mujeres y que inspiran a otras: Frida Kahlo, Salma Hayek, Lupita Jones y Lupita Nyongo, Soraya Jiménez, primera mujer mexicana en ganar una medalla de oro por participar en halterofilia, Enriqueta Basilio, primera mujer mexicana en encender el pebetero en juegos olímpicos de México, en el 68.
Hay más: Lupita Tovar, primera mujer mexicana en actuar en Hollywood, dando paso así, a otras mujeres como Dolores del Río o María Félix. Mucho antes, Sor Juana Inés de la Cruz, Josefa Ortiz de Domínguez, Leona Vicario y recientemente una mujer oaxaqueña, Yalitzia Aparicio, que derrumbó barreras clasistas, racismo, y diversas formas de discriminación, luego de participar en la película “Roma”, de Alfonso Cuarón.
En la ciencia y tecnología, muchas de ellas poco conocidas, destacan entre otras tantas: Janet Gutiérrez, que validó compuestos activos en fuentes vegetales mexicanas como el maíz, frijol negro, chile, agave y algunas frutas, son parte de su estudio que busca consolidar a la gastronomía mexicana, no por su sabor, sino por sus compuestos para la salud. La doctora dirige una de las 5 unidades de investigación del Institute for the Obesity Research, la de Alimentos Saludables.
Una mujer que destaca es Judith Zavala, que cultiva células para recrear el tejido de córnea necesario para un trasplante para pacientes con ceguera. El resultado de su investigación, junto con el doctor Jorge Valdez, es una membrana hecha de colágeno vitrificado que puede aplicarse a pacientes con ceguera mediante cirugía.
Y así como todas ellas, destacan las mamás, las abuelas, tías, hermanas, que en muchos de los casos se aglutinan como los muéganos para ayudar a sus propias familias en un gobierno que ha retirado apoyos diversos y que eran necesarios para que su trabajo fuera más humano, pero que ahora con la austeridad hecha gobierno, tienen que trabajar el doble, triple o más, para que sus familias salgan adelante.
Si Sheinbaum sigue el mismo camino de su protector estas ayudas no seguirán en su gobierno, ya que ha reiterado en múltiples ocasiones que quiere aplicar un segundo piso a la 4T, que significa continuar el deterioro del país, en contraste con lo que destaca en sus mensajes electorales.
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