El gobierno federal está por publicar el decreto por el que desaparece la Comisión Nacional para el Uso y Conocimiento de la Biodiversidad (Conabio), creada el 16 de marzo de 1992, para convertirla en una unidad coordinadora y en una dirección general en la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
La Conabio se estableció como un órgano desconcentrado con autonomía de gestión y presupuesto, una vez que parte de sus recursos provienen del fideicomiso Fondo para la Biodiversidad, el cual dispone de recursos públicos y de la Agencia de Cooperación Internacional de Japón, el Global Enviromental Facility y el Banco Mundial, entre otras fuentes. Entre sus mayores logros, de acuerdo con expertos, está el Sistema Nacional de Información sobre Biodiversidad en México.
En el proyecto de decreto que modifica el reglamento interior de la Semarnat, se plantea que todas las decisiones pasarán por la titular de la dependencia para ser aprobados. Es el caso de, por ejemplo, la formulación de los estudios, análisis, diagnósticos y evaluaciones para la generación, integración, compilación, sistematización y actualización de información técnica y científica en materia de biodiversidad.
La Unidad Coordinadora Científica y Técnica para el Conocimiento, Conservación y Uso Sustentable de la Biodiversidad tendrá, entre otras tareas, diseñar, operar y gestionar los sistemas de información geográfica, de geovisualización, de monitoreo y de alerta temprana de la biodiversidad, conjuntamente con el sector ambiental, y con el fin de que contribuyan a su conocimiento, conservación, sustentabilidad, prevención de riesgos y disminución de daños.
También, en coordinación con la Unidad Coordinadora de Asuntos Internacionales, deberá participar en las negociaciones internacionales, grupos de trabajo, foros bilaterales y regionales de los que México sea parte, con el fin de dar seguimiento a los compromisos relativos a la conservación y sustentabilidad de la biodiversidad.
En tanto, la dirección general para el Conocimiento y Conservación de la Biodiversidad, tendrá las atribuciones de dirigir la elaboración y emisión de los estudios, análisis, diagnósticos y evaluaciones, previa autorización de la persona titular de la secretaría, para la generación, integración, compilación, sistematización y actualización de información técnica y científica en materia de biodiversidad.
Deberá formular propuestas de políticas en materia de biodiversidad para fomentar su conocimiento, conservación y sustentabilidad; gestionar junto con la unidad coordinadora en la materia la celebración de convenios de coordinación o de concertación, y de cooperación técnica, en materia de biodiversidad, con dependencias de la Administración Pública Federal, las entidades federativas y los municipios, así como con organizaciones de los sectores civil, académico, social y privado, para fomentar su conocimiento, conservación y sustentabilidad.
Esta área también deberá proponer la actualización de los catálogos taxonómicos de la biota en México así como evaluar, analizar y compilar la información sobre biodiversidad, con el propósito de conocer la biota nativa y exótica presente en México.
El documento del proyecto indica que “los recursos, los expedientes en trámite, el archivo, el mobiliario y, en general, el equipo que las unidades administrativas a que se refiere este decreto, que hubieren utilizado en el ejercicio de sus atribuciones, deberán trasladarse a las unidades administrativas que se crean en el mismo, debiendo distribuirse, en su caso, de conformidad con las atribuciones que a cada una de ellas correspondan y de acuerdo con los lineamientos que emita la Unidad de Administración y Finanzas”.
El proyecto está a consulta en la página de la Comisión Nacional de Mejora Regulatoria y el único comentario que tiene es el de Luis Fueyo, ex titular de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas, quien señaló que “la Conabio le ha dado seguimiento a los compromisos internacionales adquiridos por México en materia de biodiversidad. Se creó como comisión intersecretarial porque requiere la participación de las secretarías que la integran (…) Todas las áreas que la conforman constituyen un solo proyecto: el sistema de información geográfica, el área de análisis de información y dictamen, el área internacional y el área de divulgación al público con enorme impacto a nivel internacional”.
Consideró que “la propuesta desmembra a la institución y la debilita. México se debilitaría con esta iniciativa. Otras formas administrativas serían más coherentes para cumplir con sus objetivos, como la creación de un órgano descentralizado que mantengan su composición intersecretarial”.