La importación de máquinas para la fabricación de chips se incrementó en 14% el año pasado, adelantándose a las nuevas restricciones del mercado occidental impuestas a Pekín.
Según Bloomberg, las importaciones chinas de máquinas para fabricar chips aumentaron el año pasado a medida que las empresas incrementaron la inversión en un intento de eludir los esfuerzos liderados por Estados Unidos para dañar a la industria de semiconductores del país.
Basado en cifras oficiales de la aduana, el medio especializado en finanzas calculó que, en 2023, las importaciones de maquinaria sensible a la industria para la producción de chips de computadora aumentaron un 14% a casi 40.000 millones de dólares, la segunda cantidad más alta desde 2015. Incluso con una caída del 5,5% en las importaciones chinas totales el año pasado, el aumento de las adquisiciones en el sector pone de relieve la importancia que el Gobierno chino concede a la industria.
Las empresas chinas de chips están invirtiendo rápidamente en nuevas fábricas de semiconductores para tratar de mejorar las capacidades del país y eludir los controles de exportación impuestos por Estados Unidos y sus aliados, que ven el avance chino en la industria como una amenaza comercial al sector de alta tecnología.
Las importaciones chinas provenientes de los Países Bajos se dispararon el año pasado, antes de los nuevos controles de exportación, que limitaron aún más la capacidad de empresas como la Semiconductor Manufacturing International Corporation (SMIC), con sede en Shanghái.
Asimismo, antes de que las restricciones entraran en vigor, la empresa holandesa ASML Holding NV canceló los envíos de algunas de sus máquinas top de línea para China, por petición del Gobierno de Estados Unidos, de acuerdo con la investigación del medio.(Sputnik)
