Human Rights Watch (HRW) alertó en su informe anual sobre retrocesos democráticos experimentados en 2023 en países de América Latina gobernados por líderes que, según la ONG, socavaron la separación de poderes.
“Desafortunadamente, no ha sido un buen año para los derechos humanos en la región”, afirmó la directora para América, Juanita Goebertus, durante la presentación del informe en Sao Paulo, Brasil.
Goebertus destacó tres tendencias en América Latina: las amenazas al derecho al voto y a la participación política, el deterioro de la seguridad y el “debilitamiento” de las instituciones encargadas de controlar el ejercicio del poder.
Goebertus apuntó al precedente de Donald Trump en EU, quien no reconoció su derrota electoral en 2020 y que, según la activista, “permitió a ciertos sectores de la sociedad latinoamericana hacer lo mismo”, como sucedió con la turba golpista que invadió Brasilia a inicios de 2023.
En México, donde el presidente Andrés Manuel López Obrador enfrenta su último año de mandato, hubo “pocos avances” frente a los altos niveles de violencia contra migrantes, mujeres y periodistas, entre otros grupos sociales, lamentó Human Rights Watch (HRW).
En su informe anual publicado ayer, la ONG critica los abusos contra la población civil por parte de las Fuerzas Armadas en el combate al crimen este sexenio.
“Desde 2007 hasta julio de 2023, el Ejército reportó haber matado a 5 mil 488 civiles. Estos asesinatos rara vez se investigan de forma independiente. En 2022, la Comisión Nacional de Derechos Humanos recibió mil 05 quejas contra el Ejército y la Guardia Nacional, la cifra más alta en nueve años”, indica el informe.
También recuerda que el Ejército utilizó el software Pegasus para espiar a periodistas, defensores de derechos humanos, políticos de oposición y funcionarios federales.
Sobre las desapariciones de personas, HRW acusa que Teresa Reyes Sahagún, titular de la Comisión Nacional de Búsqueda, no tiene experiencia en el tema y que la tasa de homicidios en México sigue siendo una de las más altas del mundo, a pesar de que el gobierno ha reportado una disminución en los asesinatos en los últimos dos años.
“López Obrador ha intensificado los esfuerzos para evitar que los migrantes crucen México para llegar a Estados Unidos. El presidente ha movilizado más de 31 mil soldados y las autoridades detuvieron a 444 mil migrantes en 2022, la cifra más alta de la historia”, indica HRW.
En Centroamérica, Guatemala y El Salvador se unieron a la ya conocida preocupación por la deriva autoritaria en Nicaragua, país que HRW considera una dictadura junto con Cuba y Venezuela.
El gobierno del nicaragüense Daniel Ortega, dice HRW, “sigue reprimiendo a todos los sectores de la sociedad” y su aislamiento internacional se profundizó.
Mientras, en El Salvador, la ONG acusa al presidente Nayib Bukele de “socavar el sistema de frenos y contrapesos democráticos” en su intento por salir reelegido en los comicios de este año.