El presidente Andrés Manuel López Obrador instó a que “dé tiempo” para discutir sobre la reforma que propone reducir la jornada laboral de 48 a 40 horas semanales.
En cambio, el mandatario consideró que no es necesario resolver el tema en este periodo legislativo, el cual concluye el próximo 12 de diciembre, sino que se podría continuar discutiendo el próximo año.
“No es una cosa de resolverse el 12, hasta propondría respetuosamente que no se convierta el 12 en una fecha fatal, es decir, definitiva, que se dé tiempo”, declaró este martes durante su conferencia de prensa matutina en Palacio Nacional.
Consideró que se deben escuchar todas las posturas, así como revisar qué medidas se aplican en otros países.
“Lo que sí propongo es que se abra el debate y que no dependa del 12”, dijo. “Puede ser en el próximo periodo sin problema”, agregó.
López Obrador celebró que “se abra el debate”, pero se negó a dar una postura sobre el tema y respaldó los intereses de las empresas. Asimismo, resaltó que tanto las posturas a favor como en contra son “válidas”.
En una reflexión inusual del presidente, señaló: “Todo lo que es a favor del trabajador se debe considerar como un acto de justicia pero también es importante tomar en cuenta todos los factores del proceso productivo.
“Si tomar en cuenta a todos y sí también es importante el capital, las empresas, y buscar la conciliación, pero escucharnos todos”.
La reforma que se discutirá por los legisladores propone reducir la jornada laboral de 48 a 40 horas semanales, lo que querría decir que los empleados solamente laborarían 5 días a la semana.
Esta ha sido objeto de polémica porque empleados se han pronunciado a favor, mientras que empresarios del sector privado en México lo han hecho en contra, al insistir en que no es momento para ello.
