Las inversiones de las empresas del sector de distribución de gas licuado de petróleo (LP) han mermado 11 por ciento debido al robo de este combustible, señaló Carlos Serrano Farrera, presidente ejecutivo de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Gas (Amexgas).
En entrevista en el contexto del Congreso de Gas LP 2023, el directivo comentó que el hurto del energético en el país ya representa cerca de 50 mil-60 mil toneladas mensuales, que ya es casi el 10 por ciento del mercado nacional.
“En esa proporción se están frenando las inversiones, porque no se están canalizando a la industria”, dijo.
Comentó que otro factor que influye en la inversión, es el margen de comercialización no suficiente. “No te alcanza, quieres invertir más pero no tienes con qué, entonces es muy importante atender resolver esos dos temas, para garantizar la consolidación de la industria, su seguridad y su sano desempeño”, dijo.
James Rockall, presidente de la Asociación Mundial de GLP (WLPGA, por sus siglas en inglés) comentó en entrevista sentirse sorprendido, pues no se trata de un hurto que se realice con facilidad, como lo puede ser con las gasolinas y el diésel.
Anotó que este problema es muy específico de México, pues además implica “una integración desde la extracción, el transporte, la distribución, la comercialización y toda esa cadena sorprende”
Serrano Farrera comentó que las empresas formales de distribución de gas LP no participan en actividades ilícitas, pues han acudido con la autoridad a plantear, a solicitar y exigir que se combata el robo el combustible doméstico.
“No nos equivoquemos, el problema del gas robado está en bandas de delincuencia organizada, tienen una red de extracción y de comercialización que lo hacen con pipas y con estaciones de servicio irregulares y lícitas que no forman parte de las empresas formales”, indicó.
“Le hemos pedido a las autoridades responsables de seguridad que combatan, que eviten, que eliminen, porque en los últimos años ha estado creciendo y creciendo y no vemos nosotros que se esté combatiendo con un programa efectivo, ni en la extracción y mucho menos en la distribución”, comentó.
Recordó que los estados donde se roba y se vende el energético sustraído es en el Estado de México, Ciudad de México, Puebla Veracruz, Hidalgo y Tlaxcala. Dijo que tan sólo en el Estado de México hay 350 estaciones que venden el energético y menos de la mitad tienen permisos, por lo que cuestionó que se permita la comercialización en las otras 180 estaciones.
“Falta una acción determinante al respecto y es necesario porque es la forma en que proteges una industria, es la forma en que garantizas el respeto a la ley, pero también es la que proteges a la población que es la responsabilidad que tenemos”, señaló.
