Las elecciones presidenciales de 2024 no tendrán algún impacto sobre el entorno empresarial de México, aseguró la calificadora Standard & Poor’s (S&P).
“Consideramos que la actual administración seguirá siendo prudente en la ejecución de las políticas económicas. Sin embargo, no esperamos que las acciones políticas fortalezcan sustancialmente el entorno empresarial de México”, dijo la agencia en un reporte.
Desde su perspectiva, la actividad económica en México de 2024 estará marcada por un entorno de desaceleración y mayores presiones por el aumento de precios en bienes y servicios.
“La alta inflación ha erosionado el poder adquisitivo de los hogares y los beneficios de las empresas, al tiempo que el aumento de las tasas de interés desalienta la demanda de crédito”, indicó la calificadora de riesgo crediticio.
Al respecto, precisó que el próximo año se espera un crecimiento de 1.8 por ciento, y para 2025 se prevé un repunte de dos por ciento.
“La desaceleración económica y las altas tasas presionan la capacidad de pago de deuda de hogares y empresas. Sin embargo, las prácticas de financiamiento conservadoras que aplican los bancos desde hace tiempo amortiguarán el impacto”, añadió S&P.
Pese a este entorno, destacó como un punto positivo para la economía nacional la relocalización de empresas extranjeras en el país, un fenómeno económico conocido como nearshoring.
“Seguiremos de cerca la forma en que se aborden los principales obstáculos, incluidos los problemas relacionados con la seguridad y el suministro inadecuado de agua y energía”, concluyó S&P.