Esta semana, el líder ucraniano Volodímir Zelenski canceló las elecciones, argumentando que “no es el momento adecuado”. Para el analista de seguridad en relaciones internacionales Mark Sleboda, se trata de una estrategia para mantenerse en el poder frente a las presiones estadounidenses que apuntan a un cambio de regímen.
Sleboda no es el único analista que cree que la decisión de Zelenski de suspender las elecciones, previstas para el comienzo del 2024, no tiene nada que ver con la necesidad de estabilidad política del país, sino más bien con su propio deseo de permanecer en el poder. En los últimos días, varios expertos han criticado la acción antidemocrática del líder ucraniano.
Si este es el caso, pregunta Sleboda, ¿por qué Estados Unidos está “presionando” para que Ucrania celebre elecciones presidenciales el próximo año? “Según la constitución ucraniana, los comicios no deberían realizarse bajo la ley marcial”, dijo a Sputnik el analista de seguridad.
“Pero entonces ¿por qué Estados Unidos presiona para que se celebren elecciones, especialmente si los políticos que se oponen a la escalada bélica están prohibidos en el país?”
Según el experto, hay indicios de que el Gobierno estadounidense quiere “apostar por otro caballo” y desean reemplazar a Zelenski por uno de los principales generales del Gobierno de Kiev, Valeri Zaluzhni, “sin pasar por la vergüenza de otro golpe [de Estado] respaldado por EEUU”.
El experto señaló que en las redes sociales ucranianas están “llenas de especulaciones de que se trata de un golpe político. Se dice que esto fue una advertencia a Zaluzhni y la retirada de una de sus piezas del tablero por parte del jefe de gabinete de Zelenski, [Andrei] Yermak, quien es visto como una especie de cardenal gris que manipula muchas cosas dentro del Gobierno”.
