El ataque de Israel en contra de la escuela Osama bin Zaid, gestionada por la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Medio (UNRWA) y en donde se refugian personas desplazadas en la Franja de Gaza, dejó decenas muertos y heridos, acusó el grupo palestino Hamás este 3 de noviembre.
«Apenas pasa una hora sin que la ocupación sionista cometa una masacre atroz contra nuestro pueblo pacífico, que se suma a los cientos de masacres que ha cometido, la última de las cuales es la horrible masacre en la escuela Osama bin Zaid de la UNRWA, que alberga a personas desplazadas en la zona de Al Saftawi, al norte de Gaza», informó el grupo radical en su canal de Telegram.
Según Hamás, la agresión «dejó decenas de muertos y heridos, la mayoría de ellos niños y mujeres».
La escuela había sido convertida en refugio y era considerado uno de los más grandes de la Franja de Gaza.
En la víspera, la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA) denunció que, en menos de 24 horas, cuatro albergues resultaron dañados debido a los incesantes bombardeos de Israel, incluida una escuela en el campo de refugiados de Jabalia, matando al menos a 20 personas.
El asedio militar de Israel contra la Franja de Gaza, sostenido desde el 7 de octubre y que en los últimos días escaló a operaciones terrestres, ha cobrado la vida de más de 9.000 personas desde ese día, incluidos casi 4.000 niños, según cifras del Ministerio de Salud de Palestina.
Desde el 9 de octubre, Israel mantiene al enclave palestino sin provisiones básicas, si bien el día 16 reinició el suministro de agua para el sur de Gaza, a donde se desplazan estos días cientos de miles de civiles tras la alerta de una invasión militar terrestre que Israel ha comenzado a operar en la zona norte de la Franja.
Aproximadamente 2,4 millones de personas habitan la Franja de Gaza y alrededor de la mitad reside en la zona norte, objetivo frontal del Ejército de Israel durante esta última escalada del conflicto. Sputnik