“El Curandero”

La Charlatanería Como Delito

*Aunque en México Sancionan la Falta de Título Profesional, no de Conocimientos

HORACIO ARMANDO HERNÁNDEZ OROZCO

“El Curandero” (“Znachor”) película polaca, dirigida por Michał Gazda; con la actuación de Leszek Lichota (profesor Rafał Wilczur/Antoni Kosiba), Maria Kowalska (Marysia), Ignacy Liss (conde Leszek Czyński), Anna Szymańczyk (Zośka), Mirosław Haniszewski (Jerzy Dobraniecki) y Paweł Tomaszewski (barón Krzeszowski); se estrenó el 27 de septiembre de 2023 en la plataforma de Neflix.

A finales del siglo XIX, el profesor Rafał Wilczur, un eminente médico que trabaja en una clínica de renombre, a raíz de una serie de acontecimientos inesperados, pierde a su familia y su memoria; ahora viaja por la campiña polaca en busca de alguien que no sabe quién es.

Es una adaptación de la novela “Znachor”, de Tadeusz Dołęga-Mostowicz, siendo la tercera adaptación cinematográfica, las anteriores fueron en 1937 y 1981, trayendo como tema central que aun ante la pérdida de la memoria los valores no se pierden ni el amor al ser amado.

AFAMADO DOCTOR

El profesor Rafał Wilczur se encuentra en la calle junto a su colega y amigo el doctor Jerzy Dobraniecki, cuando un niño que vende periódicos es atropellado por un carruaje, por lo que lo auxilia y traslada a la clínica privada en que trabaja; por este acto altruista y su capacidad como doctor es promovido a director de la clínica.

La presentación del personaje en su fase de doctor es la de un excelente profesionista, con alta ética y de valores hipocráticos, pues, aunque la directiva de la clínica tiene una oposición para atender al menor, Rafał está dispuesto a sufragar los gastos, este noble gesto es utilizado para lograr que existan fondos para atender a gente escasos recursos.

En una conferencia se hace hincapié en el cómbate a la charlatanería que impera en esa época en Polonia, por ello es necesario que existan recursos suficientes para atender a los más necesitados.

Posteriormente, hay otras escenas de su vida familiar, donde el espectador se percata de que es un padre amoroso, aunque a su esposa no ha logrado hacerla feliz, situación que le duele.

AFAMADO 

SUICIDIO

Cuando Rafał regresa a su casa, su esposa ha escapado con otro hombre llevándose a su hija; desesperado, sale a buscarlas y es asaltado; los golpes recibidos hacen que pierda la memoria; el doctor Jerzy Dobraniecki es testigo de la golpiza y aunque ahuyentó a los asaltantes, no hizo nada por salvarlo, lo dio por muerto, y su sorpresa fue que la policía estima que se suicidó.

La hipótesis del suicidio se basa solamente en que se encontró el abrigo del profesor a la orilla del río y que se está desaparecido; una forma sencilla para cerrar un caso, hay un suicidio, sin cuerpo, ni evidencia que denote el fallecimiento de alguien, pero si la mujer lo abandona llevándose a su hija menor, lo más lógico para la policía es que se suicidó.

AFAMADO 

CURANDERO

Han pasado varios años, y Rafał se convierte en un vagabundo que no recuerda su pasado; viaja por Polonia y en el camino ve un accidente que tienen dos aldeanos, los socorre y Zośka, una mujer dueña de un molino, le ofrece trabajo, así que ahora encuentra su lugar en el pequeño pueblo de Radoliszki.

A pesar de que no recuerda ni su nombre, Rafał todavía conserva sus habilidades médicas, así que constantemente ayuda a personas enfermas del lugar y pronto es aclamado como ‘Znachor’.

La policía local consciente de que la charlatanería es delito, no lo detiene ni lo entrega a las autoridades judiciales, porque saben que está haciendo un bien con la gente humilde que no cuenta con los recursos para ir a un doctor privado y no hay instituciones públicas para ellos; así que ahora es reconocido como el curandero.

Se suele llamar charlatán al que hace alarde de conocer algo que en realidad ignora; en medicina se denomina “curandero”; y se reconoce que el curanderismo dio origen a la medicina actual, pero en la actualidad el charlatanismo en medicina no es ejercido únicamente por gente que carece de diploma, que es el caso de los curanderos, sino también por personas con título profesional, ya que al amparo de las leyes, ocurre que algunos médicos actúan favorecidos por una publicidad comercial, y con los farmacéuticos y bioquímicos preparadores de panaceas.

En México existe el delito de Usurpación de profesión, previsto en el artículo 250 del Código Penal Federal, que sanciona con prisión de uno a seis años a quien sin tener título profesional o autorización para ejercer alguna profesión reglamentada, expedidas por autoridades u organismos legalmente capacitados para ello, conforme a las disposiciones reglamentarias del artículo 5 constitucional se atribuya el carácter de profesionista, realice actos propios de una actividad profesional, ofrezca públicamente sus servicios como profesionista, use un título para ejercer alguna actividad profesional sin tener derecho a ello, o con objeto de lucrar, se una a profesionistas legalmente autorizados con fines de ejercicio profesional o administre alguna asociación profesional.

Prácticamente lo que se sanciona es no contar con el título profesional, y no en sí la ausencia de conocimientos.

AFAMADA 

AMNESIA

En este pueblo, Rafał se hace llamar Antoni Kosiba, pues su amnesia no le permite recordar su verdadero nombre ni su origen o familiares, su pasado se ha borrado; conoce a una joven llamada Marysia, quien sufre un accidente de motocicleta y le práctica una craneotomía, razón por la cual ahora sí es juzgado como charlatán, pues ha ejercido la profesión de médico y él mismo reconoce no ser doctor.

La amnesia supone la pérdida de recuerdos, incluidos hechos, información y experiencias, pero en la vida real la gente que la sufre nunca olvida su identidad, por lo general, saben quiénes son, aunque pueden tener dificultades para incorporar información nueva y generar nuevos recuerdos.

La pérdida de memoria aislada no afecta la inteligencia, los conocimientos generales, la conciencia ni la capacidad de atención de la persona; tampoco afecta la capacidad de juicio, la personalidad ni la identidad; esto implica que exista la capacidad volitiva y, por ende, el dolo en la comisión de los delitos.

Una persona que sufre amnesia está consciente del bien y del mal, de lo que es lícito y lo ilegal, puede ser plenamente juzgada y sancionada por el derecho penal, ya que cuenta con la voluntad deliberada (elemento volitivo) para comprender la ilicitud de su conducta (elemento cognitivo).

Pero ¿qué tan válido será condenar a un verdadero doctor que cuenta con los conocimientos para salvar una vida, pero su amnesia no le permite recordar que en realidad es un profesional de la medicina?

La mejor respuesta la tendrá nuestro amable lector cuando vea esta película…

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