Yanis Varoufakis , Comportarse como adultos: mi batalla contra el establishment europeo, Editorial Deusto, Bercelona, 2017. 720 páginas.
DAVID MARKLIMO
Toda la historia está llena de momentos de gran tensión, donde ceder implica aceptar catástrofes y donde imponerse implica cierta salvación. Uno de esos momentos se produjo a principios d 2015 cuando Syriza ganó las elecciones en Grecia y se enfrentaba a una negociación con la Unión Europea por la crisis financiera. La crisis de los bancos alemanes y francés, sumada al gran despilfarro (léase deuda) de los gobiernos griegos estuvieron a punto de implosionar el país y dejarlo al borde de la quiebra.
Ese momento queda perfectamente retratado en el libro Comportarse como adultos, el libro de Yanis Varoufakis, ex ministro griego en tal momento trágico. Va por delante que Varoufakis no es un economista cualquiera: experto en la teoría de juegos, estudió Economía matemática en la Universidad de Essex, y Estadística matemática en la Universidad de Birmingham. Fue profesor de Economía Econometría en la Universidad de Essex, investigador y profesor (Research Fellow) en la Universidad de Cambridge.Es docente de la universidad de Anglia del Este, Glasgow y Sídney y en la Universidad Nacional y Kapodistríaca de Atenas. Es más, ahora mismo, es profesor en la Universidad de Texas, en Austin. Su libro aporta extraordinarias anécdotas, como la que da pie al título, cuando la directora del FMI, Christine Lagarde, agotada, espetó en una rueda de prensa que lo que la negociación necesitaba era un diálogo con “adultos en la sala”.
La primera parte del libro es el Varoufakis profesor en estado puro: docenas de ideas y enfoques originales, miles de lecturas y críticas profundas al sistema económico global y a los programas de rescate que desde 2010 ayudan y asfixian a Grecia. Se nos describen las rigideces del sistema, la falta de visión de los líderes, la falta de democracia interna de un órgano tan importante como lo es un Banco Central Común, el inmenso poder de unos cuantos funcionarios en la sombra. La explicación de por qué el diseño fallido de la Eurozona es responsable de buena parte de los desequilibrios de la última década la firmaría el mismísimo Adam Smith.
La segunda parte es un reconocimiento explícito de dónde se equivocó el Varoufakis político. Fue un error de cálculo sin precedentes. Básicamente, la estrategia consistía en hacer creer que Grecia estaba preparada para incumplir pagos, o para salir de la zona euro, lo suficiente como para convencer a los poderosos de la Unión Europea (UE, particularmente al ministro alemán) de renegociar los préstamos que estaban por vencer y evitar que hicieran estallar el sistema bancario. El juego estuvo a punto de desembocar verdaderamente en una guerra civil. Surgió el dilema era de qué hacer con el poder: era mejor ceder ante la UE que entregarle el poder a un grupo de políticos mafiosos respaldados por una horda enardecida de jóvenes.
El libro es muy interesante porque permite entender cómo funcionan dinámicas de poder dentro del Eurogrupo (los ministros de Finanzas de la Eurozona) y entre éste y el BCE, el FMI, la OECD, la Comisión Europea y los líderes internacionales. También muestra los límites entre la política y la economía: Varoufakis ve como uno por uno (Sapin, Moscovici, Schäuble, Costello, Thomsen, Lagarde, Guindos, Padoan, Gabriel, Draghi, Coeurè, Juncker, Wieser) reconocen que él lleva razón, que sus planteamientos son acertados y sus números indiscutibles, pero dirán siempre lo contrario en público. Por miedo, dogmatismo, irresponsabilidad o -como sostiene Varoufakis- ignorancia. Quizá es la parte más dramática: darse cuenta que la economía global está regulada por adultos poco conocedores, que deciden sobre el dinero sin jamás pagar una nómina de su bolsillo.
Es imposible resumir todos los diálogos y planteamientos en una reseña. Ni hablar de los matices de comportamiento de todos estos psicópatas. Pero, desde luego, si el libro cumple una función: mostrar cómo funcionan todos los órganos económicos, nombres fríos en los periódicos y que no dicen nada. Varoufakis ha escrito una de las mejores autobiografías políticas de todos los tiempos.
