Sembradores de cempasúchil han colocado personajes de calaveras, llamadas catrinas, en sus cultivos con la esperanza de atraer visitantes para superar la crisis económica que atraviesan por la sequía.
Una decena de calaveras catrinas monumentales adornan los sembradíos de flor de muerto en Mitla, Oaxaca, un municipio zapoteco que en lengua náhuatl se llama Mictlán, que significa “lugar de los muertos”.
Las calaveras, construidas con materiales degradables como cartón y carrizo, se sostienen con alambres y cuerdas entre las flores, son el principal adorno de los altares y ofrendas del Día de Muertos, festividad que se realiza los próximos 1 y 2 de noviembre.
Los campesinos colocan los esqueletos para atraer a visitantes y paliar las consecuencias económicas por la sequía.
“En las redes sociales vuela rapidísimo (el anuncio) y por eso nosotros dijimos: vamos a darle un poquito de realce con las catrinas, el esfuerzo que hicimos para hacerlas, para construirlas, es para motivar a nuestros invitados que llegaron a nuestros campos”, dijo a EFE Ramón García, un campesino de 58 años de edad que también siembra maíz, chile, ajo y tomate.