El funcionario militar israelí, Yoav Gallant, dio el lunes 23 de octubre detalles de la siguiente etapa en la guerra que sostiene su país contra Hamás en la Franja de Gaza.
«Continuaremos atacando. Será un ataque combinado mortal por aire, tierra y mar», dijo el ministro en un discurso ante las fuerzas navales.
El pasado domingo 22 de octubre, la región más afectada por el conflicto entre Israel y Hamás, la parte norte de la Franja de Gaza, registró otra tragedia: al menos 30 personas murieron después de que un campo de refugiados fuera alcanzado por un ataque aéreo israelí. La información es de la cadena de televisión Al Jazeera.
Además del gran número de víctimas mortales, el bombardeo también dejó 27 heridos.
«Treinta cadáveres, la mayoría de ellos pertenecientes a mujeres y niños, fueron recuperados entre los escombros de los edificios bombardeados en el campo de refugiados de Jabalia, en Gaza», informó una unidad de defensa civil citada por la emisora.
Debido a los bombardeos, tuvo que interrumpirse la llegada de ayuda humanitaria al territorio, donde viven alrededor de 2,3 millones de personas.
Según las Naciones Unidas (ONU), se espera que las reservas de alimentos, agua y combustible se agoten en tres días.
La Franja de Gaza vive una crisis humanitaria sin precedentes debido a los ataques de Israel, que aún no ha iniciado una operación terrestre. Sin embargo, ya se ha llamado a filas a más de 360.000 reservistas.
El número de muertos a causa del conflicto ya ha superado los 6.000, según las autoridades israelíes y palestinas. Sólo en la Franja de Gaza, más de 14.000 personas resultaron heridas y los hospitales de la región están colapsando, de acuerdo con información de la ONU.
«Estamos sufriendo una grave escasez de medicamentos y equipos médicos», dijo a Al Jazeera el director del Hospital Indonesio, ubicado en el norte de Gaza. Sputnik
