Los Dados de Dios
*Tras Segalmex y la Rapacería, hay Propuestas en Espera en el Senado de la República
NIDIA MARIN
En el limbo mexicano ahí han quedado los programas alimentarios para la población. En los bolsillos de los políticos del actual sexenio también…
Tiempo atrás alguna vez fueron y dejaron de ser. Alguna vez ayudaron y en otras ocasiones fracasaron por el castigo que sufrimos los mexicanos en el transcurso de algunos gobiernos: la corrupción de los políticos.
Y para muestra, los que programas fueron…
– Liconsa
– Desayunos escolares
– Programa de alimentos DIF
– Apoyos monetarios del Programa de Apoyo Alimentario
– Cocinas DIF
– Escuelas de Tiempo Completo (con ingesta)
– Solidaridad (llamado posteriormente Progresa, Oportunidades y Prospera)
– Comedores Comunitarios en algunas entidades, como la Ciudad de México…
Y además está el denominado gran fracaso del sexenio, el que saquearon y ha sido la aberración y el castigo: Seguridad Alimentaria Mexicana (Segalmex), que integró en una sola coordinación Liconsa y Diconsa, con fundamento en tres objetivos prioritarios:
- a) Mejorar el ingreso y la calidad de vida de los pequeños y medianos productores rurales en aras de contribuir a la producción de granos básicos y leche, así como a la autosuficiencia alimentaria.
- b) Fortalecer el sistema de abasto social de alimentos, con énfasis en productos de calidad y alto valor nutricional, considerando las preferencias y costumbres regionales, a través de la Canasta Básica, con los precios más bajos y su disponibilidad en las localidades de mayor marginación y pobreza del país.
- c) Impulsar la economía familiar y la alimentación sana y nutritiva, a través del abasto de leche de calidad a precio preferencial para sus beneficiarios, especialmente niñas, niños y adultos mayores (SADER, 2020).
¿Y qué sucedió?
Se llama corrupción, galopante.
Sin embargo, existen propuestas realizadas ante el Senado de la República, por lo que especialistas del independiente (aunque parte del Senado de la República) Instituto Belisario Domínguez, han hecho propuestas que están en espera de la voluntad de una mayoría.
Es el caso del proyecto de Ley General de la Alimentación Adecuada y Sostenible, el cual de acuerdo a la investigadora Concepción Torres Ramírez tiene por objeto:
-Establecer las bases para la participación social en las acciones encaminadas a lograr el ejercicio pleno del derecho a la alimentación adecuada.
-Promover la generación de entornos alimentarios sostenibles que propicien el consumo informado de alimentos saludable y nutritivos.
-Establecer los principios y bases para la promoción, protección, respeto y garantía en el ejercicio efectivo del derecho a la alimentación.
-Priorizar el derecho a la salud, el derecho al medio ambiente, el derecho al agua y el interés superior de la niñez en las políticas relacionadas con el derecho a la alimentación adecuada.
-Establecer mecanismos para la planeación, coordinación y competencia entre las autoridades de los diferentes ámbitos de gobierno, en las acciones encaminadas a garantizar el ejercicio del derecho a la alimentación adecuada.
-Fomentar la producción, abasto, distribución justa y equitativa, así como el consumo de alimentos nutritivos, suficientes, de calidad, inocuos y culturalmente adecuados. Fortalecer la autosuficiencia.
Precisa la especialista que en el proyecto se define como alimentación adecuada “el consumo de alimentos nutritivos, suficientes y de calidad, que satisface las necesidades fisiológicas de una persona en cada etapa de su ciclo vital, y que es adecuado a su contexto cultural, posibilita su desarrollo integral, la nutrición óptima y una vida digna”.
Las propuestas del proyecto son variadas. Por ejemplo: comedores comunitarios en localidades que lo requieran; que los servicios de salud protejan la lactancia; que las escuelas de educación inicial provean alimentos.
También plantea la creación de un programa de almacenamiento de reservas estratégicas de granos básicos y semillas que permita superar el desabasto, operado por la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural.
En su reflexión final, la investigadora señala:
“La legislación específica sobre el derecho a la alimentación en México es una tarea pendiente. El proyecto de Ley General de la Alimentación Adecuada y Sostenible que sintetiza este documento contiene definiciones y propuestas acordes con los lineamientos establecidos en los tratados internacionales en la materia. Implica una reorganización institucional sin erogaciones adicionales de presupuesto y destaca que considera la participación de los tres órdenes de gobierno y de la sociedad en las definiciones referentes al derecho a la alimentación, por lo que parece viable su aprobación”.
Y sólo para recordar…
“El 13 de octubre de 2011 fue promulgada la reforma al artículo 4º de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos que establece el derecho de toda persona “a la alimentación nutritiva, suficiente y de calidad”, así como la obligación del Estado de garantizarla. Si bien la Ley de Desarrollo Social incluye la “alimentación nutritiva y de calidad” como uno de los derechos de los sujetos de desarrollo social, once años después del reconocimiento de este derecho a nivel constitucional nuestro país carece de una ley reglamentaria específica en la materia.
“. El 19 de septiembre de 2013 fue aprobada por unanimidad en el Senado —con 101 votos— la iniciativa con Proyecto de Decreto por el que se expide la Ley General de la Alimentación Adecuada y Sostenible, misma que actualmente se encuentra como minuta en la Cámara de Diputados para su discusión y eventual aprobación. Este documento refiere el marco normativo general sobre el derecho a la alimentación adecuada y sintetiza el contenido de la propuesta de Ley”.
Hoy tras Segalmex y las tropelías y delitos cometidos, en México seguimos con las manos vacías para millones de mexicanos con carencia alimentaria.
