La Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) informó este miércoles que 263.934 personas han sido desplazadas forzosamente en la Franja de Gaza a consecuencia de los bombardeos de Israel contra el enclave, que hasta el momento causaron la muerte a 1.078 palestinos y heridas a otros 5.314.
Desde el pasado domingo, Tel Aviv inició el bombardeo de extensas áreas de Gaza, incluyendo instalaciones civiles, tras la operación Diluvio de Al-Aqsa lanzada en la jornada anterior por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás).
Del total de palestinos desplazados, 175.486 se refugiaron en escuelas de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (Unrwa, por sus siglas en inglés).
Se estima que estas cifras continuarán creciendo a causa de los intensos bombardeos israelíes por aire y con artillería de largo alcance, que han afectado más el área de Al Rimal (al oeste de Ciudad de Gaza) y Jan Yunis.
De acuerdo con un reporte actualizado de OCHA, esta cifra de desplazados es la mayor reportada desde las hostilidades ocurridas entre julio y agosto de 2014, las cuales duraron 50 días e incluyeron bombardeos y una campaña terrestre en Gaza lanzada por Israel.
A consecuencia del rápido incremento de los desplazados, OCHA alertó que las organizaciones humanitarias se enfrentan a significativos problemas para satisfacer sus necesidades básicas.
El informe recogió que ha habido ataques contra numerosos edificios residenciales, 37 instalaciones sanitarias (de acuerdo con información de la Organización Mundial de la Salud), 15 centros educativos (incluyendo cinco que pertenecen a la Urnwa) y varias instalaciones de telecomunicaciones (que causó la destrucción de dos de las tres principales líneas de comunicación móvil).
En el sector residencial se reportaron 1.009 viviendas destruidas, 560 con graves daños o inhabitables, y 12.630 con daños menores, lo cual corrobora que Israel no solo bombardea cuarteles, túneles u otros objetivos de Hamás.
Los bombardeos contra Gaza ya causaron la muerte a 1.078 palestinos y heridas a otros 5.314 los heridos, según el Ministerio de Salud palestino. Además, hubo 19 palestinos asesinados y otros 332 con lesiones en Cisjordania desde el sábado a la fecha. En este caso, los asesinatos han ocurrido durante la represión a protestas en solidaridad con Gaza y a consecuencia de la violencia ejercida por colonos israelíes contra residentes en comunidades palestinas en Nablus, Ramallah, Hebrón y Jenin.
Según Tel Aviv, más de 1.200 israelíes murieron y otros 3.700 fueron heridos desde el despliegue de la operación Diluvio de Al-Aqsa.
El portavoz de la Unrwa, Adnan Abu Hasna, declaró este miércoles a medios de prensa que Gaza se enfrentará a una catástrofe humanitaria si no se abren corredores seguros para hacer llegar ayuda a la población. Precisó que se necesitan suministros médicos, alimentos y agua.
Días atrás, Israel anunció un bloqueo total a la Franja, el cierre de todos los cruces fronterizos, y el corte total del suministro de electricidad y agua.
Se estima que la única central eléctrica de Gaza agotará su combustible al mediodía de este miércoles (horario local) a menos que reciba más. Tel Aviv advirtió que bombardearía cualquier caravana de suministro de combustible que intente llegar al área.
Según Abu Hasna,, el enclave agotará sus provisiones de alimentos en dos semanas. La interrupción total del suministro eléctrico impactará negativamente la asistencia sanitaria y otras actividades esenciales. En Gaza residen 2.2 millones de palestinos. Telesur
